El gobierno peruano entregará a Chile las pruebas de una operación de espionaje de Chile a Perú, a la espera de que el país vecino investigue y brinde las explicaciones que Lima demanda.
La entrega fue confirmada anoche por el canciller, José Antonio García Belaunde, horas después de que el presidente Alan García denunciara en duros términos el espionaje, aunque exculpando a la presidenta Michelle Bachelet y a su gobierno.
«Espero que haya una racionalidad y que el gobierno chileno establezca un mecanismo de investigación para llegar a la verdad. Nosotros acá sabemos quién realizó el espionaje, queremos saber quién lo autorizó allá y cómo se financió», manifestó.
Reveló que el sábado último, Bachelet le dijo al presidente García: «tú no podrás imaginar que yo estoy detrás de esas cosas», en un contacto entre ambos en Singapur, donde asistían a la Cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC).
En la misma oportunidad, añadió, trató el tema con Fernández, y este negó que su país realice actos de espionaje.
«Le voy a hacer llegar la información (al gobierno de Chile) justamente para que puedan procesar la denuncia», indicó, a tiempo de informar que recibió amplia información de respaldo a la denuncia peruana, en una entrevista con la fiscal de la Nación, Gladys Echaíz.
García Belaunde confirmó que el gobierno pedirá a la Policía Internacional (Interpol) que verifique los documentos y pruebas hallados, tras la detención del suboficial de la fuerza aérea Víctor Ariza, acusado de vender información a Chile.
La medida fue adelantada por el presidente Alan García horas antes, en un mensaje en el que condenó duramente el espionaje, consideró posible que el gobierno chileno no esté directamente involucrado y demandó una investigación y explicaciones del vecino país.
Entretanto, el ex director de Inteligencia, general retirado Daniel Mora, dijo que la abundancia de pruebas mostradas por el mandatario ponen en posición incómoda a la presidenta de Chile, Michelle Bachelet.
Explicó que Bachelet ha quedado en el dilema de aceptar que su gobierno es responsable del espionaje, lo que afectaría seriamente su imagen, o señalar que lo hicieron los militares, lo que pondría en evidencia que no tiene control sobre las fuerzas armadas de su país.
El canciller negó que el espía doble Ariza haya obtenido información secreta sobre la posición peruana en un litigio de fronteras con Chile que se ventila en la Corte Internacional de La Haya.