Una recompensa de 50 millones de pesos ofreció el director de la Policia Nacional general Oscar Naranjo, por información que permita identificar y capturar a los autores del atentado terrorista ejecutado en la madrugada contra el club Social Los Andaquíes, en la ciudad de Neiva, que dejo un herido y cuantiosos daños materiales.

El general Naranjo también anunció el envío de 200 uniformados a la capital del departamento del Huila, para reforzar los controles de seguridad y contrarrestar la arremetida de la llamada columna Teofilo Forero de las Farc, responsable de las acciones terroristas.

El oficial destacó que por fortuna se desactivo oportunamente una segunda carga, en un cilindro de gas, cuyo poder destructivo era superior y habría causado grandes pérdidas humanas.

El primer artefacto fue en realidad un señuelo para una segunda acción mucho más grande, advirtio el general Naranjo.

El cilindro estaba programado para explotar cuando llegaran las patrullas de la policía al sector.

El director del DAS en el Huila, John Ibáñez Ladino, aseguró que segun informes de inteligencia, este atentado fue obra de la columna Teófilo Forero de las Farc.

El petardo que estalló causó heridas de consideración a un vigilante del club y lesiones menores a una mujer, informó la Policia.

24 horas atrás, la Policía del Huila, logró en un operativo relámpago la neutralización de una acción terrorista en el centro de la ciudad de Neiva, al desactivar oportunamente 40 kilos de amonal.

Mientras tanto, en el municipio de San Antonio, al sur del departamento del Tolima, fue detonada una carga explosiva contra un local de la empresa de apuestas “Gana Gana”, sin causar víctimas, pero si daños materiales en la edificación y en 3 residencias aledañas.

Este es el tercer ataque contra la firma de chance que se ejecuta en menos de quince dias en el departamento del Tolima, atribuidos a las Farc, para presionar el pago de extorsiones.

Los anteriores se registraron en los municipios de Guamo y Chaparral, aunque en esta última localidad la carga alcanzó a ser desactivada.

Por otro lado, tropas del Ejército desmantelaron 4 campos minados y un campamento con material de guerra y explosivos, pertenecientes a las Farc.

Dos de los campos minados fueron ubicados en los municipios antioqueños de Tarazá y Turbo; otro en Tierralta, Córdoba y el último en el municipio de Puerto Guzmán, Putumayo.

Finalmente en el municipio de Guayabetal, Cundinamarca, fue desactivada una mina anti-personal.

Según el informe militar, un campamento de la cuadrilla 36 de las Farc fue ubicado en el municipio de Tarazá, Antioquia y en el mismo fueron halladas 135 minas antipersonal, ocho granadas de fragmentación, 20 detonadores, equipos de comunicaciones y material de intendencia, entre otros elementos.