
Las agencias federales de Estados Unidos anunciaron que seguirán cerradas el lunes y la mayoría de las escuelas planea suspender las clases, mientras los residentes de la Costa Este enfrentan una ventisca que dejó caer medio metro de nieve en la región.
Mientras los funcionarios trabajaban para limpiar las calles cubiertas de nieve, los meteorólogos anunciaron que otra tormenta arribaría el martes, trayendo consigo hasta 35 centímetros de nieve a la región de la costa atlántica que se extiende entre Washington y Nueva York.
La peor tormenta que azota el área de Washington en décadas llevó al cierre de los tres mayores aeropuertos de la zona durante gran parte del domingo. Los servicios de autobuses fueron suspendidos y los trenes urbanos de la región sólo funcionaron en la porción subterránea del sistema.
La Oficina de Administración de Personal Federal dijo el domingo que las agencias federales en el área de Washington permanecerían cerradas el lunes. Sólo los empleados involucrados en los servicios de emergencia debían reportarse a sus labores, informó una grabación telefónica de la agencia.
Más de 100.000 viviendas quedaron sin energía en el área de Washington, de acuerdo a la televisión local, luego de que la nieve provocó la caída de árboles y líneas de alta tensión.
La compañía de electricidad Pepco dijo que 64.000 clientes estaban sin energía, y la compañía de electricidad Dominion reportó que otras 29.000 viviendas estaban sin servicio.
El aeropuerto internacional de Baltimore-Washington reabrió su pista a las 17.00 hora local pero se esperaba que la actividad de vuelos comerciales fuera limitada, según informó la estación aérea en su sitio web.
El aeropuerto internacional de Dulles en Washington reportó que su campo de aviación estaba abierto a operaciones limitadas, pero el aeropuerto nacional Reagan en Washington informó que no tenía previsto abrir hasta la mañana del lunes.
Muchas escuelas anunciaron que suspenderían las clases hasta el martes y las autoridades advirtieron a las personas que se mantengan lejos de los caminos, que a duras penas se encuentran transitables.
Nevadas de entre 51 y 99 centímetros cayeron desde Virginia occidental hasta el sur de Nueva Jersey hasta la tarde del sábado, cuando la caída de nieve se detuvo después de más de 24 horas.
El sol invernal iluminó la capital del país, donde los transeúntes superaron a los autos en las calles desiertas y en su mayoría sin despejar. Hasta 81 centímetros de nieve cayeron en los suburbios de Washington, en la mayor nevada que afecta a la ciudad en décadas.

