Las autoridades de Antioquia no descartaron hoy la posibilidad de que se declare «campo santo» el sitio del gigantesco derrumbe en la carretera Medellín-Turbo, que sepultó entre 20 y 30 personas, debido a las dificultades para rescatar los cuerpos.

El director del Departamento Administrativo para la Prevención y Atención de Desastres de la Gobernación de Antioquia, John Freddy Rendón, señalo que debido a la enorme cantidad de tierra que se desprendió de la montaña y el riesgo de nuevas avalanchas, es probable que ninguna de las víctimas sea encontrada, por lo que se optaría por declarar el lugar campo santo.

“Eso sucedería en cuestión de ocho o 15 días, en la medida en que no se pueda buscar a ninguno de los cuerpos”, precisó Rendón, quien advirtió que un hecho cierto es que no hay sobrevivientes entre las personas sepultadas.

En el mismo sentido se pronunció el gobernador de Antioquia, Luis Alfredo Ramos, quien dijo que se trabajará en la busqueda y rescate hasta donde se pueda, esta semana y la próxima y si no es posible encontrar cuerpos, se declarará campo santo.

Mientras tanto, con la ayuda de quince perros entrenados en este tipo de emergencias, y bajo la amenaza de nuevos deslizamientos, avanzan hoy las operaciones de búsqueda y rescate de víctimas del gigantesco derrumbe que cayó sobre la carretera Medellín-Urabá, en jurisdicción del municipio de Giraldo.

Diez caninos son de la Cruz Roja y los Bomberos de Envigado, y cinco más son de la Policía de Antioquia.

Las operaciones se reanudaron aprovechando que dejó de llover y salió el sol, aunque subsiste el peligro de que se produzcan nuevos deslizamientos en la montaña, según lo señaló en Radio Santa Fe el gobernador de Antioquia, Luis Alfredo Ramos.

A su turno, el alcalde de Giraldo, Luis Algiro Manco Usuaga, señaló que hasta el momento se tiene establecido la identidad de 13 personas identificadas entre los desaparecidos bajo el alud de tierra.

En dialogo con Radio Santa Fe el funcionario señalo que la identidad de los 13 desaparecidos se ha establecido con base en reportes hechos por familiares y allegados, señalo el alcalde.

El alcalde indicó que de acuerdo con testigos presenciales, se cree que entre 20 y 30 personas fueron sepultadas por más de 80 mil metros cúbicos de tierra que se desprendieron de la montaña en momentos en que se realizaba un trasbordo entre dos buses que se encontraban a lado y lado de un alud pequeño que había taponado la carretera.

La tragedia ocurrió luego que se presentaran dos derrumbes, el primero el sábado y el segundo el domingo, debido a la impaciencia de muchos que quisieron trasbordar para llegar a sus destinos, después de dos días de espera.

El gobernador de Antioquia, Luis Alfredo Ramos, ratificó en Radio Santa Fe que la carretera Medellín-Urabá continuará cerrada por lo menos quince debido a la magnitud del derrumbe.