Los delincuentes, utilizando el buen nombre de las aseguradoras, anuncian por diferentes medios (volantes, avisos, tarjetas personales, entre otros), préstamos de dinero con los mínimos requisitos, sin fiador y con pocos intereses.
Las personas engañadas contactan por celular a los supuestos prestamistas a quienes les contestan algunas preguntas de información personal y el monto de dinero que desean recibir, los estafadores le piden como único requisito adquirir una póliza de cumplimiento de alguna aseguradora, y les dan el número de cuenta donde deben consignar el valor de la misma.
Los incautos solicitadores del dinero realizan el pago, pero nunca más vuelven a recibir información al respecto. De inmediato, las personas acuden a las oficinas aseguradoras, donde les notifican que fueron estafados.
Esta modalidad se viene presentando desde hace varios meses y recientemente, surgió también en Internet, incluso utilizando blogs, donde relacionan los requisitos para entregar los supuestos “rápidos créditos”.
