El Parlamento venezolano condenó hoy las críticas del titular de la OEA, el chileno José Miguel Insulza, a la Ley Habilitante que concede poderes legislativos extraordinarios al presidente del país, Hugo Chávez, aunque parlamentarios opositores también expresaron su rechazo a esa normativa.
El acuerdo parlamentario, aprobado en la primera sesión ordinaria de los 168 diputados elegidos en septiembre pasado, 98 oficialistas y 67 opositores para legislatura 2011-2016, acusó a Insulza de «injerencia» en los asuntos de política interna.
La Ley Habilitante fue aprobada el 17 de diciembre pasado por el Parlamento, a menos de tres semanas para que se instalara la nueva Asamblea, donde el oficialismo mantiene mayoría absoluta pero ya no cualificada, o dos tercios, que es necesaria para aprobar leyes orgánicas.
Dicha ley confirió a Chávez poderes para gobernar por decreto sin control del Legislativo hasta mediados de 2012.
En ese sentido, el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA) dijo que no consta «dentro del espíritu ni en la letra» de la Carta Democrática Interamericana el que «un Congreso que se va pueda atarle las manos al Congreso que llega».
Al presentar el texto de condena a Insulza, el diputado oficialista Carlos Escarrá lo llamó «colaboracionista de (el dictador chileno Augusto) Pinochet» y de haber mentido al decir que la Ley Habilitante impide legislar a los diputados de la Asamblea Nacional (AN, Parlamento unicameral) que recién asumieron.
Escarrá dijo que ambos poderes del Estado están facultados para hacer leyes y achacó a Insulza el haber sucumbido a las presiones de Estados Unidos «para atacar a Venezuela».
«No nos interesa hablar de Insulza, sino legislar para el pueblo venezolano», lo que incluye anular la Habilitante, replicó a su vez el diputado opositor Tomás Guanipa.
Los partidarios de Chávez «podrán defenderlo» en la OEA, cuando se debata allí si la Habilitante viola o no la Carta Democrática, añadió Guanipa e insistió en que la AN debe centrarse «en resolver los problemas reales de los venezolanos».
El también opositor William Ojeda comparó a Chávez con Adolfo Hitler y recordó que el artífice de la II Guerra Mundial también pidió y obtuvo poderes legislativos «para concentrar más y más poder».
Además, dijo, «la Habilitante no resolverá los problemas de los venezolanos que Chávez no ha resuelto en doce años» de gobernante.
La diputada oficialista Cilia Flores, presidenta de la AN en el período que le otorgó a Chávez 18 meses de poderes legislativos de los 12 que pidió, dijo que Insulza «ahora es jefe de la ultraderecha internacional», por lo mismo «es vocero de la oposición» venezolana.
En esa jefatura, agregó, Insulza cuenta «con empleados apátridas, que no tienen dignidad y eso son ustedes (los opositores), que están buscando una agresión contra Venezuela».
«Lo dicho por Insulza no debe ser nuestro problema, es problema de ustedes que lo propusieron y lo reeligieron como secretario general de la OEA», dijo a su vez Andrés Velásquez, que tildó de «pillería fraudulenta» la concesión de poderes legislativos a Chávez, «castrando la posibilidad de legislar de este Parlamento».
EFE
