El concejal de Bogotá, Felipe Ríos, dijo por Radio Santa Fe que según denuncias de vendedores de los kioskos instalados por la Administración Distrital no han logrado la efectividad comercial que se esperaba.

De acuerdo con información entregada por el cabildante, «Cada kiosko le costó a la ciudad 32.151.888 instalado y de los 608 puestos construidos el IPES (Instituto para la Economía Social) reporta 105 sin beneficiario. Adicionalmente de los reportados como ocupados en un recorrido por 92 de ellos 36 están cerrados permanentemente según los habitantes de la zona»

Ríos explicó que “Estas iniciativas o programas no estan siendo efectivas a los ojos de la población que transita por la ciudad a diario y tampoco entre los vendedores informales que consideran igualmente que no han sido efectivos los programas y optan por continuar a las ventas informales. El problema continúa creciendo y se le va a desbordar al Distrito”.

El concejal de Cambio Radical dijo que comprobó estas falencias realizando un recorrido que evidenció la falta de control sobre los kioskos entregados.

Ríos aseguró que «se contrastó con una respuesta del IPES a un derecho de petición de noviembre de 2010 donde reporta los 304 kioskos con asignaciones señalando el nombre de la persona a cargo y se estableció que hay dobles asignaciones, asignaciones de kioskos que no existen y personas que a pesar de tener asignado un kiosko continúa trabajando en su antiguo punto callejero y según versiones de los mismos vendedores informales existe el subarriendo en distintos puntos de la ciudad»

De acuerdo con el concejal, la visita se realizó a 92 puntos de venta aleatorios dentro de las localidades de Candelaria y Santafe en 2 días.