El presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abas, criticó hoy a Israel por su responsabilidad en los sucesivos fracasos de las negociaciones de paz, y no obstante exhortó a su contraparte a reconstruir los puentes de diálogo.

Al iniciar su discurso ante la 66 Asamblea General de Naciones Unidas (ONU) y luego de entregar formalmente la solicitud oficial para ser un miembro de pleno derecho en el organismo, Abas fue recibido con una ovación de pie por parte de las legaciones diplomáticas presentes.

Podemos regresar de inmediato a la mesa de negociaciones sobre la base de la legitimidad del Estado palestino, nuestros esfuerzos no están dirigidos a aislar a Israel, solo queremos que sus asentamientos se consideren ilícitos, remarcó el dirigente.

Agregó que “en nombre del pueblo palestino extiendo la mano al pueblo israelí en pos de conciliar la paz (…) hasta ahora el fracaso de las pláticas es culpa de la política colonialista de Israel y de la ocupación militarizada de territorios palestinos”, dijo.

Abas subrayó ante la Asamblea General de la ONU que la política israelí de establecer colonias destruirá cualquier posibilidad de lograr una solución de dos Estados, para la que hay consenso internacional, apuntó.

“El reclamo y el derecho de nuestro pueblo a la paz y la prosperidad es incontestable, desde hace mucho tiempo debió existir un Estado palestino, hay una primavera palestina que busca la independencia (…) Palestina renace, es mi mensaje”, enfatizó el líder árabe.

Minutos antes de iniciar su alocución y ante las cámaras de televisión, Abas le entregó al secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, una carpeta con el escudo palestino que contiene la carta de petición de soberanía.

El presidente de la ANP denunció además una política de limpieza étnica implementada por Israel, “sacándonos de un territorio ancestral, la potencia ocupante sigue haciendo excavaciones en nuestros sitios sagrados, sigue acosando la ciudad sagrada con asentamientos”.

Tal ocupación -recalcó- continúa reduciendo nuestras fronteras, desafía y socava la posibilidad real de un Estado palestino, y sigue imponiendo una guerra de agresión con la consecuente destrucción de escuelas, hospitales y mezquitas.

Las acciones criminales de los colonos se han intensificado con ataques directos contra nuestro pueblo, contra terrenos agrícolas, y a pesar de nuestras alertas, las autoridades israelíes no han retrocedido en sus propósitos ofensivos, reafirmó Abas.

Israel es responsable de los fracasos continuos para salvar el proceso de paz, su política amenaza con quebrantar la estructura de la ANP, y podría transformar el conflicto en nuestra región en un conflicto más extendido, acotó el dirigente palestino.

Estados Unidos intentó sin éxito convencer a Abas para que se abstuviera de presentar su petición formal ante la ONU, pensando en que este paso podría acarrear una eventual futura denuncia ante tribunales internacionales en contra del fuerte aliado de Washington, Tel Aviv.

Medios internacionales reportaron al mismo tiempo que un palestino murió y otros tres resultaron heridos por disparos del ejército israelí en Cisjordania, luego de enfrentamientos callejeros en un ambiente de tensión en coincidencia con la intervención de Abas.

Además fuentes policiales informaron de choques en la localidad de Beni Salha, Bilin y Naalin, y también en el paso de Qalandia. Otros manifestantes se congregaron al oeste de Ramala para protestar por la presencia de fuerzas militares israelíes.

Los soldados reprimieron a los activistas con gases lacrimógenos y otros equipos antidisturbios sofisticados. Israel desplegó 22 mil policías a lo largo de la llamada Línea Verde -instituida por el alto al fuego de 1967- en las localidades israelíes de mayoría árabe y en Jerusalén Este. Prensa Latina