De alabanza y adoración a Dios se colmó anoche, durante tres horas y media, el Parque Simón Bolívar a nombre de una de las bandas cristianas más representativas del mundo entero, Hillsong United, quienes con letras inspiradoras conectaron con Dios cada uno de los asistentes.
Con un grito extremo de ¡oe, oe, oe, oe Jesús, Jesús!, contagiaron a los asistentes, quienes estremecieron el lugar, demostrando sin temor alguno una entrega suprema por el creador.
La agrupación australiana liderada por los pastores Brian y Bobbie Houston llegó a Colombia para dar lo mejor de sí, entregando con pasión desbordante el amor que los envuelve, Jesús, y así lo recibió el público colombiano, que con las manos elevadas al cielo, saltos de alegría y entonando a una sola voz canciones como Hossana, Tomalo, Desde mi interior y otras canciones de su más reciente producción, En mi lugar, dejaron fluir una extrema adoración, que para nada se hizo esperar.
En medio de la música, el pastor Brian Houston dio una charla con la que motivó a los asistentes a través de mensajes inspiradores que dejaron claro el propósito que los mueve.
“Más que un evento, queremos un efecto que dure, que haga que la gente crea que puede hacer algo significativo”
Su Presencia, banda bogotana de la Iglesia el Lugar de Su Presencia fue la encargada de abrir el evento, que de acuerdo a lo organizado dio inicio en punto de las 6, y prender el “fuego” en los aficionados con canciones como Espíritu santo, de su nueva producción, Él y Fuego, u¬no de sus sencillos que más contagian.
Añadido a ello, todo un juego de luces, pantallas y un gran despliegue tecnológico hicieron de la noche un tiempo mucho más agradable para cada asistente, quienes manifestaron satisfacción con el protocolo establecido.
El concierto se realizó como el cierre del evento Un día con Hillsong, que contó con una conferencia en las horas de la mañana. Y que se está realizando en varios países de Latinoamérica como Bolivia, donde ya se desarrolló el evento, Chile y Ecuador, donde próximamente estarán.
Finalmente, con más música y gritos a todo pulmón del público, la agrupación se despidió, dejando claro que todo lo que hacen lo hacen por Dios, y motivando a que en Colombia se levante una generación que eleve el nombre de Jesús y que tenga un encuentro con Dios, que los lleve a cambiar desde su interior.
“más que nuestra fama queremos dejar el nombre de Jesús en alto, enseñando que la única manera de llevar el evangelio es viviendo un vida que brille, es decir que sea verdaderamente justa”. ?

De: Natalia Bustos