Tras una acción militar que se cumplía en zona rural de Solano en el departamento del Caquetá que llevó a un intercambio de dispararon entre guerrilleros de las Farc y soldados de las Fuerzas Especiales, donde finalmente fueron ajusticiados cuatro integrantes de la Fuerza Público, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos condenó el asesinato de estos uniformados a manos de las Farc.

En un comunicado emitido en las últimas horas, Cristian Salazar, representante de la Oficina de Derechos Humanos de las Naciones Unidas en Colombia indicó que «estos asesinatos atroces reflejan una terrible falta de humanidad y un desprecio total por la vida. Merecen el repudio más fuerte y provocan una profunda tristeza por el inmenso sufrimiento de los secuestrados y sus familias».

El funcionario precisó que estos actos irracionales no son una práctica aislada o esporádica. Son crímenes de guerra que podrían constituir crímenes de lesa humanidad. Son el producto de la deshumanización progresiva del conflicto armado interno.

La Oficina del Alto Comisionado de Derechos Humanos expresó su más profunda y sentida solidaridad con las familias de las personas asesinadas, de igual manera exhortó a los integrantes de las Farc a que de manera inmediata y sin condiciones liberen a todas las personas secuestradas y que cesen todos los actos violatorios del derecho internacional humanitario.

El comunicado termina diciendo que la Oficina vuelve a llamar a la búsqueda de una solución pacífica al conflicto armado que asegure una paz sostenible y duradera al pueblo colombiano, con pleno respeto de los derechos de las víctimas y de los derechos humanos.