
La institución educativa fue trasladada a la carrera 56 #54A-25, donde anteriormente funcionaba la funeraria La Aurora, cambio que según los padres de familia, no fue concertado entre educadores y acudientes.
Ante la macabra sede, padres de familias y estudiantes, no ven con muy buenos ojos el cambio y no falta el pequeño o el familiar supersticioso que no descarta la posibilidad de cruzarse con algún espanto.
Por su parte, las directivas del establecimiento educativo aseguraron a los medios que sí se le informó a las familias sobre el cambio de sede, y de acuerdo con la Secretaría de Educación, el traslado de 240 estudiante se ordenó dentro de un plan de ajuste económico.
