Cerca de 200 personas fueron retenidas por los disturbios registrados en desarrollo de las marchas del día del trabajo en las ciudades de Bogotá, Medellín y Cali.

Entre los retenidos figuran 65 menores de edad.

Según el director de seguridad ciudadana de la Policía Nacional, general Rodolfo Palomino, los disturbios más graves se presentaron en la Plaza de Bolívar de Bogotá, donde los vándalos atacaron a la Policía y destruyeron los ventanales del Palacio Arzobispal.

A lo largo de la carrera séptima, por donde desfiló la marcha sindical, también fueron rotas las vidrieras de algunos establecimientos comerciales e igualmente se pintaron con grafitis paredes y puertas de las edificaciones.

Por estos hechos fueron retenidas 146 personas, de ellas 41 menores.
La policía Metropolitana informo que doce detenidos fueron dejados en manos de la fiscalía para ser judicializados por daño en cosa ajena y lesiones a la policía.

En Medellín, los disturbios dejaron 16 lesionados, entre ellos seis policías y más de 600 millones de pesos en daños.

Según el reporte de la Policia unos encapuchados destruyeron las cámaras de fotomultas, las vidrieras de locales comerciales y los paraderos de buses.

La policía retuvo a 45 manifestantes, entre estos siete menores de edad.

En la ciudad de Cali tambien se presentaron graves desórdenes, en desarrollo de los cuales fueron retenidos 20 vándalos, 12 de los cuales serán judicializados por ataque a la autoridad y daño en cosa ajena.