La Cámara de Representantes dio luz verde a un proyecto que obliga a que se investiguen los casos de violencia intrafamiliar, lo cual significa que las mujeres no podrán desistir de las demandas contra quienes las agredan.

La iniciativa, que busca reducir las cifras de violencia contra las mujeres, fue aprobada este martes por unanimidad.

“En todos los casos en que se tenga conocimiento de la comisión de conductas relacionadas con presuntos delitos de violencia contra la mujer, las autoridades judiciales investigarán de oficio, en cumplimiento de la obligación de actuar con la debida diligencia para prevenir, investigar y sancionar la violencia contra las mujeres”, cita el proyecto.

Así las cosas, los presuntos delitos de violencia contra la mujer que lleguen a los tribunales no podrán ser objeto de desistimiento.

Según explicó la representante Gloría Stella Díaz, el proyecto busca que la violencia intrafamiliar y la inasistencia alimentaria «dejen de ser delitos querellables y desistibles».

«Quitándoles ese carácter, estos delitos ya no va a poder ser conciliables, cualquier persona puede denunciarlos y la autoridad, de oficio, deberá iniciar la investigación. Además dejarán de ser excarcelables y no tendrán ningún tipo de beneficio», explicó la congresista del Movimiento Mira.

Según la legisladora ahora el agresor no podrá arreglar las cosas con ‘palabras dulces’ para que retire la demanda y luego agredirla física, sicológica o sexualmente.

La legislación actual otorga penas entre cuatro y ocho años de prisión para quienes incurran en los delitos de violencia intrafamiliar e inasistencia alimentaria.