La OTAN demostró su disgusto frente al Gobierno de Siria por derribar un avión caza turco, una acción que calificaron de «inaceptable», y exigieron que Damasco dé pasos para evitar más incidentes. Al mismo tiempo, el primer ministro turco, Recep Tayip Erdogan, dijo que su país considerará una amenaza y un objetivo militar a cualquier unidad militar siria que se acerque a su frontera.

Los embajadores de los 28 países miembros de la Alianza Atlántica se reunieron el martes en Bruselas para abordar lo ocurrido convocados por Turquía, que también pertenece a la OTAN.

«Los aliados de la OTAN han expresado una fuerte condena de este acto completamente inaceptable», manifestó el secretario general de la alianza militar, Anders Fogh Rasmussen.

Rasmussen dijo que la seguridad de la OTAN es «indivisible», pero agregó que no se abordó el artículo 5 de su carta fundacional, en el que se dice que un ataque contra uno de sus miembros es un ataque contra toda la organización.

«Estamos con Turquía con un espíritu de solidaridad», manifestó.

Santa Fe con Reuters