La ubicación del centro comercial Titán Plaza, en la intersección de la Av. Boyacá y la Calle 80, ha causado múltiples congestiones vehiculares que dificultan la movilidad en esta zona de la ciudad.
Tanto el día de su apertura, como en las semanas siguientes, los coductores han expuesto quejas a través de los medios de comunicación, quejándose de los embotellamientos que se presentan, en especial, los fines de semana.
Según la Secretaria Distrital de Movilidad, desde antes de inaugurarse el centro comercial se planteó un Plan de Manejo de Tránsito que no ha sido cumplido a cabalidad por Titán Plaza.
Entre los requerimientos se solicitaron mejoras en la señalización de vías y ciclorrutas, reductores de velocidad y requizas rápidas al ingreso a los parqueaderos del centro comercial.
De acuerdo con Juan Carlos Silva, gerente de Titán Plaza, sí “se han implementado medidas de seguridad más ágiles para el ingreso vehicular, siguiendo los acuerdos de las mesas de trabajo realizadas con Movilidad». Además se ha dispuesto un grupo logístico en 30 cuadras a la redonda, para informar a los ciudadanos sobre los cupos de parqueadero y tiempo aproximado de espera para ingresar.
Silva dijo que “desde el principio los desarrolladores de Titán contemplaron los temas de movilidad y las exigencias de las autoridades”.
Y añadió que aún trabajan con la Secretaría de Movilidad Distrital para poner en marcha acciones que minimicen el impacto de la apertura y convocatoria del centro comercial.
El centro comercial Titán Plaza era uno de los más esperados por los bogotanos por la llegada de famosos almacenes extranjeros como Forever 21. Para entrar a este almacén de ropa, que tiene prendas a bajo precio, se debe hacer fila y no se puede volver a ingresar si ya lo hizo una vez.