Las autoridades palestinas abrieron el martes la tumba de Yasser Arafat y expertos forenses tomaron muestras de los restos como parte de una investigación, ocho años después de la misteriosa muerte del líder palestino, para determinar si fue envenenado, como afirman parientes y algunos de sus sucesores políticos.

La exhumación comenzó antes del amanecer con el mausoleo cubierto de enormes piezas de lona azul en lo que fue el centro de su gobierno en la ciudad de Ramala en Cisjordania, indicó AP.

Arafat murió a los 75 años en noviembre de 2004 en un hospital militar francés un mes después de caer súbitamente enfermo en su recinto de Ramala, que para entonces estaba sitiado por los soldados israelíes.

La causa informada de inmediato sobre el deceso fue un derrame cerebral, pero los motivos subyacentes son imprecisos, lo cual ha creado la idea generalizada en el mundo árabe de que Israel envenenó a Arafat, símbolo del nacionalismo palestino.

Israel ha negado cualquier participación en la muerte de Arafat.

Santa Fe con agencias