
Al menos 74 personas resultaron heridas en Nueva York al accidentarse ayer por la mañana un ferry procedente de Highlands, en el estado de Nueva Jersey, al llegar al atracadero en el sur de Manhattan, cerca de Wall Street, y chocar contra el muelle.
De acuerdo con la información, siete personas sufrieron heridas graves. En las imágenes de TV se vio que el ferry tenía una gran abertura en el costado. También tenía varias ventanas rotas. El jefe de la línea de ferrys SeaStreak, James Barker, señaló al canal NBC que muchas personas salieron despedidas de sus asientos por el golpe. La gente que ya estaba de pie para bajar se golpeó contra la pared. Un pasajero dijo al canal ABC que se sintió como un accidente de automóvil. “Nadie entendía qué pasaba”, afirmó. Una mujer contó que la gente se puso histérica y comenzó a gritar.
“Nos caímos unos encima de otros”. Otra testigo dijo que el ferry ya se movía mucho cuando salió del puerto. “Luego el dique chocó duramente contra el lado derecho del barco, como una bomba”. A bordo del ferry viajaban unas 300 personas.
La comisión de seguridad de la National Transportation Safety Board, la autoridad nacional de seguridad en el transporte, instrumentará una investigación sobre el accidente. Entre otras cosas se investigó si el capitán estaba ebrio o drogado, según la NTSB. “Es un procedimiento normal en accidentes de este tipo, pero aún no tenemos el resultado”, señaló un funcionario. El Pier 11, donde se produjo el accidente, fue cerrado.
Algunos viajes en ferry fueron reprogramados y otros, cancelados. Miles de personas utilizan día a día los ferrys que conectan Manhattan con barrios como Staten Island, Brooklyn o Queens.
Santa Fe con agencias
