El defensor del Pueblo de Colombia, Jorge Otálora, señaló que más de 900 personas, incluyendo unos 400 menores de edad han tenido que desplazarse de sus tierras en el Alto, Medio y Bajo Baudó chocoano, a raíz de los cruentos enfrentamientos que desde inicios de 2013 se han presentado entre las bandas criminales de Los Urabeños y Los Rastrojos, quienes se disputan el control de las rutas del narcotráfico en la región.

Según lo denunció Otálora,»encontramos un pueblo fantasma y varias comunidades negras desplazadas de sus territorios», y explicó que los los desplazados se ubicaron en cinco lugares diferentes adaptados como albergues temporales en Docoró, cabecera municipal de San Juan.

El desplazamiento se inició, según Otálora «con 50 personas y al día de hoy ya van 903 personas, de las cuales 403 son menores de edad».

El Defensor del Pueblo hizo un llamado al Director del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), Diego Molano, para que brinde atención urgente, adecuada y diferencial a la población infantil desplazada.

Por último, también le pidió al gobernador del Chocó, Hugo Arley Tovar, convocar una reunión del Comité Departamental de Justicia Transicional para analizar la situación y adoptar las medidas pertinentes para la atención de las víctimas.