El gobierno colombiano desautorizó esta semana cualquier gestión de paz que se realice con la insurgencia, en forma independiente a los diálogos que sostienen delegados oficiales y de las Farc en La Habana.

El ministro del Interior, Fernando Carrillo, afirmó que el manejo del tema de la paz es exclusivo del gobierno, por lo que pidió a gobernadores, alcaldes y sociedad civil evitar dialogar con los grupos armados sin autorización.

“Hemos dicho que nadie está autorizado para adelantar diálogos en forma regional, la paz es un monopolio del gobierno y de la Comisión Negociadora que está en La Habana”, Cuba, subrayó el funcionario colombiano.

Las conversaciones, que se concentran en este momento en el tema agrario, tienen a Cuba y Noruega como países garantes, y a Chile y Venezuela como países acompañantes.

“En el territorio regional nadie está autorizado (para que promueva diálogos de paz)”, dijo Carrillo tras una reunión con jefes de policía en Bogotá, a quienes recordó que existe una directriz que prohíbe gestiones paralelas.