La recién elegida Miss EEUU Erin Brady, tiene 25 años, una belleza espectacular y un pasado bastante triste.

Brady se crió en un hogar conflictivo, donde el consumo de estupefacientes y alcohol era moneda de uso corriente. Lo cuenta ella misma en la ficha de presentación del concurso, donde dice también que su propósito es convertirse en abogada de niños que viven en hogares conflictivos. «La mitad de los adictos proceden de familias donde se ha abusado de las drogas y la bebida», observa la nueva Miss.

Erin, de grandes ojos verdes, representó el domingo al estado de Connecticut en el certamen y se impuso a otras 51 candidatas. La chica es originaria de East Hampton y está licenciada en Finanzas con estudios de Justicia.

De momento trabaja ejerciendo un férrero control sobre las actividades de los trabajadores de una multinacional. Miss Illinois y Miss Utah, completaron el podio.