En medio del debate sobre el Marco Legal para la Paz, organizado por la Revista Semana y la Fiscalía General de la Nación, la Ministra de Justicia, Ruth Stella Correa, sostuvo que no puede pensarse en una salida jurídica para acabar el conflicto con la lógica de un país en contexto de normalidad.

«No podemos hablar de Marco Jurídico para la Paz en el contexto de un Estado en condiciones de normalidad. Si estuviéramos en un estado de normalidad no hubiéramos necesitado el Marco», dijo.

La funcionaria agregó en este sentido que «somos un Estado con 60 o más años de conflicto que está aspirando finalmente a lograr ese proceso de paz, una paz edificada en la justicia. Pero se debe tener la claridad meridiana de que los estándares de justicia van a estar determinados precisamente por el acuerdo de paz que pretenda lograrse, siempre y cuando respeten la jurisprudencia internacional y sobre todo los derechos de las víctimas».

«Hay que ser objetivos con el tema y las posibilidades reales que implica, que existan unas investigaciones en relación con los máximos responsables, que exista una selección y una priorización de los delitos a investigar, que va a depender de lo que el mismo Congreso establezca en una Ley Estatutaria», expuso la Ministra Correa.

A su turno, el Viceministro de Justicia Miguel Samper Strouss, pidió no subestimar las posibilidades que ofrece la justicia transicional.

«En ningún lugar del mundo ha logrado un país en conflicto transitar a la paz juzgando todos los crímenes y a absolutamente a todos quienes los perpetraron. Tampoco con la amnistía de todos los delitos. Pero en ese rango del medio hay una infinidad de posibilidades», manifestó el Viceministro.

Samper agregó que «han surgido profetas que han querido adelantarse a las discusiones que deben darse cuando se reglamente el Marco. El debate de la justicia transicional va mucho más allá de lo penal», y en ese sentido pidió no subestimar tampoco a las víctimas del conflicto.

«Las víctimas no están pidiendo venganza, sino que se materialicen sus derechos. Sin justicia no hay transición. Pero tampoco habrá paz si no hay verdad y si no hay reparación», concluyó el funcionario.