Ecopetrol, accedió a subir 4 millones de dólares a su ofrecimiento inicial que era de 92, con el fin de negociar el cese de protestas de la Unión Sindical Obrera que cumplen apostados en las entradas de Reficar dos días.

Edwin Castaño Monsalve, secretario de asuntos internacionales de Funtraenergética, fue el encargado de dar la noticia a los trabajadores de la organización sindical en paro. Esto como ganancia y como una esperanza de que si es posible llegar a una concertación con la “comisión patronal”, como llaman ellos a Ecopetrol, Reficar y CB&I.

Su petición inicial era de 158 millones dólares, pero durante las negociaciones la han bajado a 133 millones de dólares. “Las negociaciones van lentas, pero consideramos que sí se puede conseguir algo. Principalmente lo que queremos es que haya una equidad salarial entre el trabajador local y el trabajador extranjero”, precisó Jaime Agámez, uno de los manifestantes.

Los huelguistas prepararon sancocho y café para poder en pie durante la huelga y calmar el hambre y el sueño. “También queremos que haya una equidad en el trato. A los extranjeros los tratan mejor que a nosotros los locales y les permiten cosas que para nosotros es causal de despido, como por ejemplo quitarse el casco dentro de la obra”, precisó, otro de los huelguistas, Maider Gutiérrez.

Los participantes de la huelga se han distribuido en turnos de 12 horas para hacer presencia en las afueras de las puertas de Reficar. Son ellos los que en las puertas, con lista en mano, mantienen el control de quien entra y quién sale del proyecto de expansión.