Un bebé en Arabia Saudita sufría un grave problema de obesidad infantil; con tan solo con dos años de edad, pesaba 33 kilogramos. Por ello, el menor fue sometido a una peligrosa cirugía de reducción de estómago.

Este bebé que es la persona más joven del mundo en pasar por el quirófano por este tipo de cirugía, sufría además de piernas arqueadas debido al sobrepeso y apnea severa del sueño, lo que provocaba que dejara de respirar mientras dormía.

A pesar de ello, quienes se han enterado del caso, temen por el desarrollo físico y mental del niño de apenas dos años. La noticia ha desatado la polémica en el país, poniendo en duda si la decisión de sus padres ha sido la más acertada.

La cirugía, consistió en la extracción del 60% del estómago, restringiendo así la ingesta de alimentos. El pequeño fue operado en 2010, aunque no fue hasta hace unos días que los cirujanos que atendieron el caso publicaron un informe sobre el proceso y las conclusiones de la operación en la revista especializada en cirugía ‘ScienceDirect’.

«El cerebro crece tan rápidamente entre el nacimiento y los tres años de edad, que él todavía se encuentra justo en esa fase de desarrollo», explicó la doctora Jennifer Shu,.

Además del impacto inmediato que puede tener dicha intervención quirúrgica en el pequeño, se desconocen las consecuencias a futuro que tal cirugía podría tener a largo plazo en el desarrollo del niño.