En el Foro sobre reforma al Código Penitenciario y Carcelario, que se realiza en el Paraninfo de la Universidad del Cauca, el Ministro de Justicia, Alfonso Gómez Méndez, indicó que tiene que haber una posición clara en la manera de afrontar las sanciones para los criminales en Colombia, y que ello no dependa de las decisiones que se adopten bajo los hechos coyunturales.

«Voy a hacer todo lo posible por resolver el problema penitenciario del país. El Código Penitenciario que llegó a Comisión Primera del Senado ha sido enriquecido por la Fiscalía General de la Nación, la Defensoría del Pueblo y el Congreso. Y el que salió ayer no será el mismo que el que salga de la plenaria del Senado», dijo Gómez Méndez, quien agregó que una comisión estará a cargo de seguir recogiendo propuestas.

El Ministro de Justicia llamó la atención acerca de la contradicción entre una sociedad que pide cárcel para todo — «en ocasiones sin la suficiente reflexión», dijo– y la misma sociedad que después se queja del hacinamiento.

«Y voy a decir algo más, hemos tenido problemas porque en los sitios donde se ha proyectado ampliar los cupos las comunidades nos dicen que no. Vamos a tratar de idearnos dónde las vamos a hacer, por ahora se me ocurre en el cielo», afirmó.

El jefe de la cartera de Justicia indicó frente a la guardia del Inpec, que es partidario de fortalecer la carrera administrativa en la medida en que sea una herramienta para que el Estado obtenga un mejor servicio: «eso se logra con instrumentos de evaluación para que tengan una carrera eficiente, transparente y correcta», dijo.

«La carrera penitenciaria es uno de nuestros objetivos, como lo es también mejorar las condiciones salariales de la guardia y mejorar las instalaciones de las cárceles. Nadie está pensando en masacres burocráticas ni en excarcelaciones masivas con el Código Penitenciario», señaló Gómez Méndez.

El Ministro de Justicia destacó la necesidad de un censo depurado que dé cuenta de quienes verdaderamente deben estar en la cárcel y en conseguir una política criminal coherente de Estado.

«Si seguimos con el aumento de penas tendríamos que acabar con la resocialización: Si a una persona de 30 años la condenan a 60, probablemente logre la resocialización pero en el más allá», y agregó que el aumento de penas históricamente no han llevado a una disminución de la criminalidad.

«Este Código es un primer paso. Le pedimos a la sociedad que lo mire con buenos ojos, como parte de una solución a corto, mediano y largo plazo. Y en lo que sí vamos a insistir es en que esto tan bien escrito no se quede en el papel», concluyó.