Unos 30 vehículos comenzarán a movilizarse a través de la carrera séptima a partir de este sábado 26 de octubre. Se espera que el servicio pueda transportar a más de 3.000 bogotanos por hora.

Ante la falta de una troncal ligera o pesada de TransMilenio (TM), e incluso ante la ausencia de un tranvía –proyectos planteados para mejorar la movilidad de la carrera 7ª de Bogotá durante los últimos ocho años y que se han quedado en el papel–, un total de 30 buses padrones recorrerán a partir de este sábado el emblemático corredor.

La iniciativa surge a partir de la falta de movilidad y graves de problemas de congestión que se da en esta importante vía de la ciudad. Además hace parte de un plan de la Administración para contrarrestar el caos en dicha vía, con problemas de contaminación y ruido.

Según la Cámara de Comercio la carrera 7.ª tiene la mayor densidad de rutas de transporte público, en su tramo más cargado, entre las calles 26 y 45,

Los padrones, tienen puertas a cada lado y funcionan con combustible diésel Euro V. La ruta con que contará será a partir de las 5 a. m. desde la estación Bicentenario, en la carrera 10.ª con calle 6.ª, en el suroriente y partirán por la troncal de TM de la carrera 10.ª, luego irán hasta la estación subterránea del Museo Nacional. En este punto harán la conexión, para salir a la carrera 7ª y finalizar el recorrido en la calle 72.