El hecho ocurrió en Montería cuando el médico Jesús Puche, quien conducía su carro de placas BPN 927, y fue requerido para una verificación de documentos y prueba de alcoholemia por parte de las autoridades se negara y decidiera agredir con palabras groseras y puñetazos a los agentes.

El galeno, tras negarse a la prueba, dijo que prestaba sus servicios en la Brigada 11 del Ejército con sede en la capital cordobesa. Sin embargo, ese argumento no fue considerado justificable por los agentes para oponerse a los requerimientos.

Uno de los patrulleros grabó las escenas, en las cuales se observan los golpes que lanza el agresor en contra de los uniformados. Incluso, interrumpe la grabación cuando se da cuenta que es filmado y golpea al agente que portaba la cámara.

Minutos después, cuando el vehículo que conducía iba a ser inmovilizado, Puche se acuesta en la cama cuna de la grúa para impedir el procedimiento policial. Al final, el carro fue llevado a los patios del tránsito municipal.

El comandante de la Policía en Córdoba, coronel Carlos Vargas Rodríguez, dijo que el agente golpeado por Puche fue sometido a una valoración médica para establecer su sufrió laceraciones producto de los puñetazos. También dijo que a través de policía judicial se inició una investigación en contra del médico por sus agresiones en contra de una miembro de la fuerza pública.

En cuanto a sus vínculos con la Brigada 11 del Ejército, el coronel Vargas dijo que se pudo constatar que Puche presta servicios a esa institución como profesional externo y que no forma parte del cuerpo administrativo oficial.

“Yo le pido a este profesional de la medicina, de la manera más respetuosa, que pida disculpas públicas a los agentes que desarrollaron el operativo de control y a la ciudadanía por su comportamiento inadecuado, porque los uniformados estaban cumpliendo con su deber y él, como ciudadano debe acatar este tipo de requerimientos”, dijo Vargas.