Sierra Leona comenzó cuarentena de tres días, en un esfuerzo por contener la rápida expansión del virus del ébola. Los seis millones de residentes de este país africano han recibido la orden de quedarse en sus casas durante el viernes, sábado y domingo.

Cuadrillas de voluntarios van casa por casa, buscando casos de ébola no reportados e instruyendo a la gente a cómo evitar la mortal enfermedad.

Aproximadamente 2.600 personas han muerto por el brote de ébola, principalmente en Guinea, Liberia y Sierra Leona.

En reunión de emergencia, el Consejo de Seguridad de la ONU aprobó una resolución que pide a las naciones miembros aumentar los recursos para enfrentar la enfermedad.

“No podemos permitirnos retrasos. El castigo por la inacción es alto. Tenemos que adelantarnos al brote y enfrentarlo con toda nuestra energía y fuerza. Cuento con el apoyo del Consejo de Seguridad y el de la Asamblea General y todos los estados miembros para cumplir con esta prueba”, manifestó el secretario de la ONU, Ban Ki-moon.

Organizaciones y líderes mundiales, incluyendo las Naciones Unidas, han expresado preocupación sobre la seguridad en el oeste de África a medida que el virus se expande.