Nacional

Colombia conmemora centenario del magnicidio de Rafel Uribe Uribe

rafael uribeBogotá conmemora este 15 de octubre, 100 años del maginicidio del jefe liberal Rafael Uribe Uribe, cometido en el año 1914 en la capital del país. Uribe Uribe fue conocido por su ideario político a favor de la instauración de un socialismo de carácter corporativo y sindicalista en Colombia.

De la misma manera, fue conocido por su labor diplomática y a favor de los cafeteros colombianos en el combate de las enfermedades tales como la roya. Uno de sus grandes aportes fue, junto con Benjamín Herrera, la fundación de la Universidad Republicana que más tarde se convertiría en la Universidad Libre de Colombia.

Rafael Uribe Uribe fue un paladín de la libertad y un hombre comprometido con las causas sociales; su crimen jamás debe pasar al olvido. Uribe Uribe escribió, por ejemplo, lo que demuestra su talante democrático, cosas como la siguiente que hoy adquieren una profunda dimensión: “Yo he podido renunciar de una vez por todas y para siempre, a ser un revolucionario con las armas, pero no he renunciado a ser un revolucionario y un agitador en el campo de las ideas”.

El caudillo liberal, participó en tres guerras civiles en el siglo XIX, entre ellas la de los Mil Días contra las concepciones conservadoras que predominaban en el Estado y cuyas derrotas aceptó.

Los hechos ocurridosaquel 15 de octubre de 1914 en la calle Séptima con carrera Novena, cerca al Capitolio Nacional, donde hoy se exhibe una placa conmemorativa, fueron narrados en el libro «Reportaje de la Historia de Colombia».

“A las 11:30 de la mañana Galarza y Carvajal salieron de una carpintería rumbo a la casa del General; llevaban sus hachuelas debajo de las ruanas.

Fueron a la vivienda ubicada en la esquina sudoeste de la calle Novena con carrera Quinta, frente al Camarín de la Iglesia del Carmen. “En una tienda diagonal a la casa tomaron un trago de aguardiente y esperaron que el General saliera (…), ignoraban que su víctima trabajaba toda la mañana y no salía después de mediodía”, se lee en el mencionado libro.

Según el texto, los homicidas hicieron varias rondas por el lugar, estuvieron en la puerta del Colegio de las Hermanas de La Caridad, e incluso familiares de Rafael Uribe los vieron pero no sospecharon nada. El día de su muerte iba solo: era, según cuenta la historia, la 1:15 de la tarde; se dirigía al Capitolio Nacional a asistir a la sesión del Senado, pues era miembro del mismo, por la circunscripción de Antioquia. Dice este libro histórico que a cinco metros de distancia y frente a él caminaba Galarza, mientras Carvajal esperaba instrucciones atrás.

Al llegar a la carrera Sexta, el General salió a la calle para no tener interrupciones a su paso, Carvajal se cambió de acera y Galarza le seguía los pasos. “Al llegar a mitad de la cuadra, Galarza se adelantó al General, subió el embaldosado por donde éste iba, se devolvió, sacó el hacha de la ruana y mientras la levantaba, le dijo: ‘Usted es el que nos tiene fregados’ y le lanzó un golpe sobre la cabeza que le impactó el lado izquierdo de la frente.

“Al recibir este golpe, el General tambaleó, se inclinó hacia adelante, y cayó boca abajo, sin quejarse siquiera (…), Carvajal también descargó un golpe por detrás de la cabeza”. Luego, según se cuenta, el General recibió otros dos hachazos, homicidas huyeron del sitio, pero fueron capturados más adelante. “El general Uribe Uribe dejó de respirar a las 2:10 de la madrugada del 16 de octubre. Era un viernes”.

Con información de elnuevodia.com.co