El ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, señaló este viernes que la pérdida de un armamento en una estación de Policía en Bogotá «raya en lo absurdo» y agregó que este tipo de casos son inaceptables».

Pinzón, dijo que este insólito hecho “es una oportunidad para demostrar que podemos recuperar esas armas y que tenemos que capturar a esos bandidos, sean externos o internos, si es que hubo una penetración para robar estas armas”.

“Lo que ocurrió raya en lo absurdo, eso es inaceptable y sé que la posición del general Palomino es que vamos a demostrar que podemos recuperar esas armas”, reiteró.

Agregó que “no le podemos permitir a la delincuencia que ande tan campante, como si nada. En eso quiero ser enfático. Seguiremos persiguiendo al terrorismo como factor de construcción de las paz, así como a las bandas criminales y al crimen organizado”.

El hecho es que en la Escuela de Carabineros, que se localiza en el sector de La Gaitana, en la localidad de Suba, fueron sustraídas 17 pistolas y 3 fusiles del depósito de armas, luego de que los agentes de guardia fueran aparentemente “escopolaminados”, según las primeras versiones que han trascendido en medios de la misma institución.

Por el momento, el comando de la Policía Metropolitana de Bogotá y la Inspección General de la Policía Nacional dispusieron una severa investigación para identificar a los autores del robo de las armas y establecer las responsabilidades del caso entre el personal de la Escuela de Carabineros.
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En todo caso, no es el primer robo de armas que se produce en la Policía Nacional en Bogotá. En noviembre del año pasado, cuando un perito aduanero revisaba los documentos para nacionalizar 990 pistolas importadas, tipo Sig Sauer 9 milímetros, por la Policía Nacional, se detectó que en 10 cajas hacían falta 100 armas.
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Ante la novedad, solo pudieron ser nacionalizadas 890 y se abrió una investigación, tanto penal como disciplinaria, contra 11 policías que tuvieron contacto con la bodega del Fondo Rotatorio de la Policía.