Estamos aquí para contribuir a aliviar los sufrimientos de los gazatíes, dijo el portavoz oficial del Gobierno de unidad, Ihab Bseiso, a nombre del grupo de trabajo, integrado por nueve titulares y 39 especialistas.
En octubre pasado una conferencia mundial de donantes, celebrada en El Cairo bajo el patrocinio de Egipto y Noruega, recabó compromisos de ayuda por cinco mil 400 millones de dólares, mil 400 por encima de los solicitados por las autoridades palestinas.
Gran parte de la ayuda aún no ha fluido y existen obstáculos para su recepción, acorde con declaraciones la víspera del canciller egipcio, Sami Chukri, que las achacó a la desconfianza prevaleciente entre palestinos e israelíes.
El ministro de Trabajo palestino, Mamoun Abu Shahla, dijo que las prioridades son ayudar a la población a encontrar empleo, los problemas de los trabajadores de Gaza, la reapertura de los pasos fronterizos que Israel mantiene cerrados y la entrada de materiales de construcción.
Gaza está bloqueada hace ocho años por las autoridades israelíes que han sometido a la población a proyectos elaborados por el Ejército para saber el mínimo de alimentos que requiere una persona para no morir de inanición y provocar una catástrofe humanitaria.
La situación se complica por el cierre del paso fronterizo con Egipto desde la escalada el año pasado de ataques de insurgentes armados contra posiciones del Ejército y la Policía en la península de Sinaí, fronteriza con la franja.
El Gobierno egipcio acusa a la dirección del movimiento islamista palestino Hamas, en control de la franja, de apoyar a los grupos armados con hombres y logística, una alegación que la cúpula de esa agrupación refuta.
Fuente: PL
