Tras el anuncio del presidente Santos sobre la suspensión de las fumigaciones de cultivos ilícitos con glifosato en el país, el expresidente y senador, Álvaro Uribe, criticó la decisión y aseguró que hace parte de una exigencia de la guerrilla de las Farc.

El senador Uribe citó el estudio entregado por las Naciones Unidas sobre el aumento de más del 40% en los cultivos ilícitos en Colombia y alertó que este incremento ha permitido la financiación del terrorismo y la destrucción de 2 mil hectáreas de bosque primario en Colombia.

“Las Farc exigió en los acuerdos de La Habana la eliminación de las fumigaciones aéreas. Las Drogas ilícitas son grandes contaminantes de fuentes de agua. Basta constatar extinción de especies acuáticas en el Putumayo”, afirmó el senador Uribe.

De acuerdo con el senador Uribe, el Gobierno anunció “suspender fumigaciones que ya había acordado y estaban reducidas al mínimo” y señaló que el crecimiento de cultivos “coincide con el control terrorista en zonas como el Catatumbo, Putumayo y Norte de Antioquia”.

Finalmente, aseguró que de los más de cinco millones de glifosato que usa Colombia al año, menos del 2% se emplean en fumigaciones de drogas. Por lo que se cuestionó: “¿Qué hará con la agricultura y con la aspersión a los cultivos de drogas?”.