–En una operación realizada por la Fiscalía en conjunto con la Agencia Antidrogas de Estados Unidos, DEA y las Policías de México y Colombia, fue incautada cerca de una tonelada de cocaína negra en el aeropuerto Internacional de Eldorado de Bogotá, la capital colombiana.

El cargamento, que pesó exactamente 961.67 kilos de la droga, fue encontrado dentro de 40 costales con óxido de zinc, que ya había sido embarcado en un avión de carga, vuelo AM0762, que tenía como destino a ciudad de México.

En la operación, inicialmente no se produjeron capturas de responsables por el voluminos cargamento de droga, que se afirma habría sido embarcada por narcotraficantes de Cartagena y Bogotá, aliados con los carteles de la droga mexicanos.

Supuestamente, la droga sería enviada desde México a Estados Unidos y Europa a través de Centro América, de acuerdo con el reporte de la Dirección de Fiscalía Especializada contra el Crimen Organizado, que lideró la investigación.

La cocaína negra forma parte de la gran gama de combinaciones que hacen las mafias del narcotráfico para camuflar la droga. Hay cocína también roja, líquida, gomosa, mezclada con plástico o embebida en la ropa. Lo último en el negocio del tráfico ya no parecen ser los trucos para esconder los cargamentos en cosas (sillones, muñecas, alfajores) sino hacer irreconocible la droga en sí misma, mezclándola con diferentes sustancias, de acuerdo con los especialistas en el tema.

La cocaína negra no tiene olor y es dura como la piedra y para volverla a su estado natural, la sumergen en solvente, se le agrega cloroformo para separarla e hidróxido de amonio para decantarla; luego del filtrado se le agrega eter sulfúrico como purificador y así se «rescata».

No es la primera vez que cae en Colombia cocaína negra. El primer cargamento de droga con este color fue decomisado en el mismo aeropuerto Eldorado en mayo de 1998.

En esa oportunidad se encontraron en las bodegas de la empresa Tampa dos canecas con 115 kilos de cocaína negra que iba a ser enviada a Italia.

Entonces, los investigadores concluyeron que los narcos compraban por canecas el carbón de leña triturado y lo mezclaban con hierro en polvo, que es fácilmente adquirido en el mercado. Luego revolvían la cocaína pura con estos productos y así obtenían la sorprendente cocaína negra.