“TransMilenio y el transporte público en Bogotá son un bien de la ciudadanía sobre el cual todos tenemos responsabilidades” aseguró la Concejal de Bogotá por el Centro Democrático, Angela Garzón Caicedo, quien se mostró preocupada por un reciente estudio publicado por Foro Económico Mundial (Weforum) sobre cuáles ciudades tienen el transporte público más peligroso para las mujeres.

No sólo se denuncian a diario agresiones, hurtos y hasta personas que utilizan los vagones como sanitarios, con la excusa de que no hay baños en las estaciones. Un reciente estudio publicado por el Weforum muestra un panorama preocupante para los usuarios, pero especialmente para las mujeres, quienes son acosadas, intimidadas y violentadas. No importa si es en el primer mundo o en el tercero, asegura el estudio que es el sexo femenino el que a diario sufre el mayor número de situaciones que las hacen sentir en peligro.

“Queremos ciudades seguras para las mujeres; en general, una ciudad segura para todos” reclamó la Concejal de Bogotá por el Centro Democrático, Angela Garzón Caicedo. “Me duele ver cómo somos mencionados a diario en diferentes escenarios como una ciudad inequitativa, en la cual la mujer sigue llevando la peor parte”, reflexionó.

El estudio, que fue realizado por la Fundación Thompson Reuters en colaboración con la encuestadora YouGov, y recibió respuestas de más de 6.550 mujeres en 15 de las más grandes capitales del mundo y Nueva York (la ciudad más grande de los Estados Unidos) permitió elaborar un ranking que, tristemente, es encabezado por Bogotá.

“Le siguen Ciudad de México y Lima, pero para nuestra capital, la sensación de inseguridad y el riesgo de ser atacadas es una realidad de todos los días” recalcó la Concejal. Basta observar unos pocos titulares de los medios de comunicación para ver cómo en menos de una semana las noticias negativas están en primera plana. “Tenemos que recuperar a Bogotá, el amor y el orgullo por nuestra ciudad”, indicó la cabildante, “y a ello llegaremos con la puesta de marcha de una Secretaría de Seguridad que ya ha sido aprobada por el Concejo y cuyo nacimiento depende de la sanción del alcalde mayor”, recordó.

Las preguntas versaban sobre qué tanto riesgo sentían de ser acosadas verbal o físicamente, si habría pasajeros que vendrían en su ayuda, si las autoridades les generan confianza a la hora de investigar sobre una denuncia de violencia o acoso; en general, preguntaban sobre algo que no debería ser motivo de consulta: se siente segura al utilizar transporte público?

Por encima de ciudades con muchos más millones de habitantes, el porcentaje de mujeres que sienten que no pueden abordar un transporte público con tranquilidad, es mayor porcentualmente en nuestra ciudad, y esto conlleva otros aspectos, como los psicológicos que se derivan del miedo permanente o los sociales como aquellos de sentir que por ser mujeres tienen un valor menor y pueden ser utilizadas, tocadas o “manosedas” por los demás.

Sin embargo, hay que aprender de ciudades que han cambiado este panorama, como Tokyo, en donde se utilizan vagones exclusivos para mujeres o Nueva York que aumentó la red de cámaras de circuito cerrado de televisión, lo que intimida a los agresores.

“Bogotá no puede seguir siendo ejemplo de lo que no está bien; con un gobierno empoderado y una ciudadanía comprometida, podemos volver a sentirnos orgullosos de la ciudad” concluyó Angela Garzón Caicedo.