–En manifestación permanente se han declarado habitantes del sector de Playa Blanca, en el barrio Olaya Herrera de Cartagena, para pedir justicia tras la muerte de una niña de cuatro años como consecuencia de una bala perdida, según ellos, disparada por la Policía cuando trató de controlar a unos borrachos en un establecimiento comercial de la zona.

En los hechos, también resultaron heridos una señora de 40 años y un joven de 17, que por fortuna, ya están fuera de peligro.

El general Carlos Rodríguez, comandante de la institución, señaló que la niña perdió la vida en confusos incidentes registrados el domingo en la noche cuando los agentes llegaron al local a pedir que le bajaran el volumen a un picó (equipo de sonido) y fueron agredidos con objetos contundentes y, al parecer, también les dispararon con armas de fuego.

El oficial indicó que se espera el reporte de Medicina Legal para conocer las causas oficiales de la muerte, pero adelantó que hay una investigación disciplinaria en marcha al interior de la Policía y además resaltó que la Fiscalía adelanta también la investigación penal correspondiente para establecer responsabilidades.

El hecho es que en medio de la trifulca que se suscitó con el ingreso de los policías, se produjeron varios disparos y uno de ellos impactó en el pecho a la niña de 4 años.

La menor fue llevada a un centro asistencial cercano, pero llegó sin signos vitales, según lo indicaron los médicos.

Los familiares de la niña señalan que uno de los agentes fue el que disparó la bala que mató a la menor.

La niña muerta, que vivía con su madre Yesneidis Angulo Pérez, hermana y su abuela materna, Aida Pérez Murillo, quien señaló que la pequeña había salido de su casa con una prima de 11 años a la tienda de la esquina de la cuadra a comprar un yogur.

Dijo que los testigos le contaron que cuando llegaron los policías a pedir que le bajaran el volumen al equipo de sonido, un joven que estaba en el lugar le dio una cachetada a uno de los uniformados y emprendió a correr y los policías empezaron a perseguirlo.

«Uno de los policías le disparó al joven”, dijo y añadió que al parecer esta bala habría sido la que alcanzó a la niña cuando salía de la tienda y que además, el uniformado se fue y no la auxilió.

“Me duele el pecho, llévame donde mi mamá”, fue lo único que le pudo decir la niña de 4 años a su prima, luego de recibir la bala, reseñó el diario El Universal de Cartagena al narrar los hechos.

La niña afectada intentó correr y se desmayó. Su prima quiso cargarla, pero no pudo. Un vecino que es enfermero la levantó, y en una moto la llevó a la policlínica de Olaya, pero allí llegó sin signos vitales.

La dueña de la casa donde se produjo el incidente Rosina Zúñiga Llerena, de 40 años, recibió otra bala en el tórax, pero por fortuna no le afectó órganos vitales. Otro joven recibió un balazo en una pierna.

“Yo acaba de salir a buscar a una hija mía cuando sentí la bulla. Vi que dos policías discutían con varios jóvenes y agarré a mi hija y le dije corre porque aquí se va a armar pelea. Corrí, pero cuando voltee a mirar sentí el balazo”, contó Rosina, quien igual que la niña fue llevada a la policlínica de Olaya. Le menor pereció mientras los médicos trataban de estabilizarla. El cuerpo de esta será velado en su casa y sus familiares exigen que la muerte no quede impune.