Economía

Industriales dicen No al impuesto al consumo del 8% para las motocicletas

motos-1–La Asociación Nacional de Industriales, ANDI, llamó la atención del gobierno nacional sobre las negativas consecuencias que tendrá el impuesto al consumo del 8 por ciento que se le pretende aplicar a las motocicletas dentro de la Reforma Tributaria, pues advierte que no se trata de un bien suntuario ni de lujo. Además, afirma que este tributo «pone en riesgo la seguridad jurídica y la estabilidad en las reglas de los industriales».

«Gravar a todas las motocicletas con el impuesto al consumo de 8%, adicional al incremento de la tarifa de IVA de 16% a 19%, afectaría al momento de la compra el bolsillo de más de 6 millones de colombianos y sus familias, de los estratos 1, 2 y 3 en aproximadamente medio salario mínimo», señala la agremiación empresarial en un comunicado expedido este lunes.

Recuerda que la motocicleta es el medio de transporte utilizado por excelencia en más del 26% de los hogares, que se constituye en una solución económica y eficiente de movilidad, mejora la calidad de vida de sus usuarios, es óptima en las zonas rurales y apartadas y se usa principalmente como herramienta de trabajo para oficios como servicios a domicilios, mensajería y repartición.

La ANDI advierte que el impuesto al consumo tiene como propósito gravar bienes o servicios suntuarios y de lujo.

«Las motocicletas son productos de consumo masivo, utilizadas por la población vulnerable y de escasos recursos, por lo tanto, no se les debe aplicar más impuestos, a excepción de lo ya establecido para las motocicletas de más de 250cc», subraya.

En 2016, el mercado de motocicletas sufre una contracción cercana al 15,2%, causada principalmente por efecto de la devaluación, el incremento de las tasas de interés, la pérdida de la confianza del consumidor y la caída del PIB. En 2017, se sumaría una contracción estimada del 35% a causa del impoconsumo, puntualiza.

De igual forma–subraya–, limitaría el acceso a la motocicleta en el futuro a las clases menos favorecidas, debido a la alta elasticidad del producto. En otras palabras, este incremento abrupto en el precio del vehículo por el impuesto al consumo no es consecuente con la capacidad adquisitiva de los usuarios y los afectaría inmediatamente.

Adicionalmente reseña que con esta reducción en el mercado, no se lograrían las metas de recaudo adicional que espera el Gobierno y se reduciría el actual recaudo por concepto de IVA.

Igualmente pone de presente que el 96% de las motocicletas que se venden en el país son fabricadas en Colombia y contribuyen con el 1,05% del PIB industrial, por lo que el impacto negativo de este nuevo impuesto podría dejar sin empleo a 24.000 personas, de los 70.000 que hoy trabajan en las ensambladoras, los concesionarios, la red de servicios, los talleres y los almacenes de repuestos.

«El impuesto al consumo pone en riesgo la seguridad jurídica y la estabilidad en las reglas de los industriales, quienes han realizado inversiones por más de US$120 millones, tan sólo en los dos últimos años; mayoritariamente en zonas de conflicto como el departamento del Cauca», concluye el comunicado.