La línea de ropa de Ivanka Trump, la hija del presidente de EE.UU., Donald Trump, triplicó en febrero sus ventas pese a la campaña de boicot en contra de sus productos.

La presidenta de la compañía, Abigail Klem, dijo en una entrevista, el pasado ocho de marzo, que Refinery29 ha tenido «algunas de las mejores semanas» de su historia en lo que a ventas se refiere.

Aunque no proporcionó cifras, el portal de comercio electrónico británico Lyst registró un incremento de ventas del 346 % entre enero y febrero y de un 557 % con respecto a febrero de 2016.
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Estas cifras llegan en plena campaña de boicot contra la marca y después que algunas cadenas de tiendas como Nordstrom retiraran sus productos alegando una bajada en las ventas.

El presidente Trump criticó esa decisión que Nordstrom tomó poco después de su llegada a la Casa Blanca: «Mi hija Ivanka ha recibido un trato tan injusto de @Nordstrom.
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¡Ella es una gran persona, siempre empujándome para hacer lo correcto! ¡Terrible!».

La polémica fue a más cuando la consejera presidencial, Kellyanne Conway, hizo publicad de la marca en televisión. «Vayan y compren los productos de Ivanka. Es una línea maravillosa, yo tengo algunos de sus productos», dijo Conway en una entrevista por Fox News.

La consejera presidencial recibió «consejo legal» de la Casa Blanca tras esas declaraciones y la Oficina de Ética de Estados Unidos pidió sanciones en su contra.