Ciencia y Tecnología

Nuevo material reduce al mínimo consumo de energía en celulares

Los investigadores españoles desarrollaron un nuevo material, aleación de cobre y níquel, que puede reducir al mínimo el gasto energético de los dispositivos electrónicos, ordenadores y teléfonos móviles.

Según Jordi Sort, profesor del Departamento de Física de la UAB, que ha dirigido la investigación, «estas nanoesponjas pueden ser la base de nuevas memorias magnéticas en ordenadores o teléfonos móviles con mucha más eficiencia energética que las actuales».

Y agregó que: «Hay muchos investigadores aplicando los materiales nanoporosos en la mejora de procesos físico-químicos, como el desarrollo de nuevos sensores, pero nosotros hemos investigado qué pueden aportar estos materiales al electromagnetismo».

El físico señaló además: «Los nanoporos en su interior ofrecen una gran cantidad de superficie. Con esta inmensa superficie concentrada en un espacio muy pequeño podemos aplicar el voltaje de una pila y disminuir enormemente la energía necesaria para orientar los dominios magnéticos y registrar los datos».

Según Sort, «esto supone un nuevo paradigma para el ahorro energético en los ordenadores y en la computación y manipulación de datos magnéticos en general».

y explicó que para registrar la información en las memorias magnéticas convencionales de los dispositivos electrónicos, los pequeños dominios magnéticos de los materiales actúan como imanes, que se orientan utilizando campos magnéticos.

El físico puntualizó que: «Implementar este material en las memorias de los ordenadores y dispositivos móviles tendría muchas ventajas, principalmente un ahorro económico directo en la facturación de consumo eléctrico de los ordenadores y un incremento considerable en la autonomía de los dispositivos móviles».

El nuevo material, que publica hoy la revista Advanced Functional Materials, consiste en capas nanoporosas de una aleación de cobre y níquel, organizadas de tal manera que en su interior forma superficies y agujeros similares a los del interior de una esponja, donde los poros tienen separaciones de tan sólo 5 o 10 nanómetros, lo que significa que en las paredes de los poros sólo hay lugar para unas decenas de átomos.