Bogotá

Concejal Diego Devia pide formalización de los artesanos de Usaquén

El centro histórico de Usaquén es sin lugar a dudas uno de los sectores con mayor atractivo turístico de la ciudad, sin embargo, allí se venía presentando una problemática relacionada con el gremio de los artesanos, pues para el desarrollo de su actividad hacían uso del espacio público, lo que llevó a la creación de un mercado informal de artesanías, visitado cada fin de semana por unos 1.800 turistas, según los propios artesanos, y que varias veces fue objeto de operativos de recuperación del espacio público, dejándoles constantemente sin un escenario para comercializar sus productos.

Esta situación, que se ha venido presentando desde hace por lo menos cinco años, no había encontrado una solución, debido a la falta de voluntad política y administrativa de las anteriores alcaldías locales, que solo se enfocaron en los operativos mencionados anteriormente, sin interesarse en el bienestar económico de los artesanos.

Ante esto, el Concejal Diego Devia lideró varias mesas de trabajo con representantes del gremio de los artesanos de Bogotá, así como con entidades de la Administración, como la Secretaria de Desarrollo Económico y la Alcaldía Local de Usaquén, con el objetivo de encontrar una solución que armonizara el mejor uso del espacio público con el potencial económico que representan las artesanías.

En ese sentido, la solución a la que se llegó para beneficiar a todos, no solo a los artesanos, fue el diseño e implementación por parte de la Administración, de un protocolo institucional para el aprovechamiento económico del espacio público bajo la modalidad de corto plazo en la actividad de mercado temporal, que básicamente regula el uso de este espacio público, permitiendo que los artesanos, debidamente organizados, puedan usarlo para comercializar sus productos, cumpliendo una serie de requisitos, que tienen que ver principalmente con la duración del mercado, el pago de un alquiler por el espacio público, el horario, la seguridad, la logística, las medidas de emergencia, los baños públicos, la disposición y recolección de residuos, y el aseo del lugar.

Este protocolo fue adoptado en noviembre de 2017, permitiendo así que estos artesanos pudieran llevar a cabo su mercado temporal durante la pasada temporada navideña, ya que en diciembre de 2016 no lo pudieron hacer porque no se encontraba regulado el aprovechamiento económico de este espacio público. De hecho, los artesanos de Usaquén reportan que con la implementación del protocolo, sus ventas aumentaron un 30%.

No obstante, el protocolo también permite solucionar otros hechos que se venían presentando en la plaza fundacional de Usaquén, como los problemas de convivencia asociados al consumo de alcohol y sustancias psicoactivas, y que estaban generando malestar entre los residentes del sector, e incluso inseguridad, perjudicando a los artesanos que acudían allí con el único propósito de trabajar, pues el protocolo prohíbe expresamente la venta y consumo de bebidas alcohólicas y sustancias alucinógenas.

Sin embargo este no fue el único beneficio, sino que por medio de este protocolo también se logró formalizar este grupo de artesanos dentro de la economía de la ciudad, como un camino para fortalecer la tranquilidad de los residentes del sector, como también para los comerciantes, turistas y visitantes locales, fortaleciendo también la seguridad, conservando la belleza y estética del sector, disminuyendo la contaminación visual, y aumentando la confianza de todos los sectores económicos involucrados.

Otro de los logros alcanzados con este protocolo es que mejoró la convivencia, pues los mismos artesanos reconocen que no hubo riñas durante el mercado temporal llevado a cabo el pasado diciembre, y que mejoraron sus relaciones con los otros gremios de comerciantes presentes en el centro histórico de Usaquén.

Así las cosas, el Concejal Diego Devia manifiesta su satisfacción por haber contribuido para la formalización de los artesanos de Usaquén, con el interés de llevar este mismo caso de éxito a otras localidades de la ciudad, fortaleciendo así la industria artesanal y el aprovechamiento del espacio público de Bogotá y Colombia.