Un balance entregado por el viceministro de Transporte, Juan Camilo Ostos, dejó ver que las sanciones impuestas este año ya llegan a casi cien mil, y los vehículos inmovilizados ya se cuentan por casi 70.000, en todo el territorio nacional.
Ostos señaló que: “Pasamos en 2017 de 47.000 sanciones por conductas asociadas al transporte ilegal a que en 2019 cerremos con alrededor de cien mil sanciones. De hecho, más de 5.000 licencias con suspensiones hasta de tres años”.
Y agregó que: “Estamos también con la Superintendencia del Transporte haciendo un llamado a las autoridades territoriales de tránsito para que cumplan con sus funciones y combatan la ilegalidad para garantizar que los usuarios estén seguros en los servicios formales y los empresarios tengan la posibilidad de mejorar su operación”.
El funcionario recordó que cada gobierno local es la autoridad de tránsito en su territorio, por lo que entre todos debe hacerse frente a esta actividad ilegal.
Por otro lado, un proyecto de ley hace carrera en el Congreso con la intención de regular las plataformas digitales que trabajan para el transporte, conocidas como Uber, Beat o Cabify, con el objeto de equiparar las condiciones con el servicio de taxis.
El representante, Mauricio Toro, señaló que: «La cancha está desequilibrada, los taxis amarillos tiene una cantidad de cargas que no tienen las empresas de transporte como Uber, Beat y Cabify y ha llegado la hora de crear un mecanismo de regulación -ya que el Estado no lo hizo-, por parte del Congreso, para decirles a estas plataformas que hay para todos, porque la tecnología llegó para quedarse».
Y agregó que: «Crear un fondo de compensación de cupos, porque muchas familias viven de un taxi. Ahora las plataformas tendrían que también pagar cupos y tributar en Colombia. Las plataformas pagan IVA pero no tributan renta sobre los ingresos».
Uber, Beat, DiDi o Cabify, deberían tener una licencia de conducción especial como la que tienen los taxistas, dice la propuesta.