–Debido a las numerosas demandas por abusos sexuales que sus líderes, voluntarios y empleados habrían cometido contra menores de edad, la organización juvenil de los Boy Scouts de los Estados Unidos (BSA por su sigla en inglés) se declaró en bancarrota.

En su página en Internet, BSA afirma que la declaratoria, bajo el Capítulo 11 del Código de Bancarrota de los Estados Unidos, busca lograr dos objetivos clave: compensar equitativamente a las víctimas que fueron dañadas durante su tiempo en Scouting y continuar cumpliendo su misión en los años venideros.

La BSA tiene la intención de utilizar el proceso del Capítulo 11 para crear un Fideicomiso de Compensación de Víctimas que proporcionaría una compensación equitativa a las víctimas, precisa.

“La BSA se preocupa profundamente por todas las víctimas de abuso y se disculpa sinceramente con cualquiera que haya sido perjudicado durante su tiempo en el Movimiento Scout. Nos indigna que haya habido momentos en que las personas aprovecharon nuestros programas para dañar a niños inocentes», señala Roger Mosby, presidente y director ejecutivo.

«Si bien sabemos –añade — que nada puede deshacer el trágico abuso que sufrieron las víctimas, creemos que el proceso del Capítulo 11, con la estructura del Fideicomiso propuesta, proporcionará una compensación equitativa a todas las víctimas mientras se mantiene la importante misión de la BSA».

Indica que la BSA tiene el importante deber de mantener a los niños seguros, apoyados y protegidos mientras los prepara para su futuro, y la organización tiene la intención de continuar cumpliendo con estas importantes responsabilidades.

Trágicamente –subraya–, ha habido momentos en que las personas aprovecharon los programas de BSA para dañar a los niños. La BSA cree firmemente que una estructura propuesta para el Fideicomiso de Compensación de Víctimas es el mejor medio para compensar a las víctimas de una manera equitativa y que proteja sus identidades. La BSA alienta a las víctimas a presentar un reclamo a medida que avanza el proceso de bancarrota y proporcionará avisos claros y completos sobre cómo hacerlo.

Igualmente afirma que Scouting continuará brindando programas incomparables a los jóvenes, manteniéndolos seguros, apoyados y protegidos mientras los prepara para su futuro. La BSA de hoy tiene algunas de las políticas de protección juvenil más sólidas e informadas por expertos que se encuentran en cualquier organización que sirve a los jóvenes, incluida la capacitación obligatoria de protección juvenil y las verificaciones de antecedentes para todos los voluntarios y el personal, así como políticas que prohíben la interacción uno a uno entre jóvenes y adultos y requieren que todos los voluntarios y el personal denuncien cualquier sospecha de abuso a la policía.

La organización Boy Scouts, fundado en 1910, enfrenta unas 300 demandas por ataques sexuales, en las que al menos 13.000 de sus antiguos escultistas se presentan como víctimas. Casí 8.000 posibles abusadores están identificados en archivos disciplinarios elaborados desde 1944 y la lista de esos sospechosos incluye a policías, profesores, militares, médicos, un alcalde y un sicólogo infantil.

Los Boy Scouts of America destacan en su bandera que proporcionan el programa juvenil más importante de EE.UU para el desarrollo del carácter y la capacitación en liderazgo basada en valores, que ayuda a los jóvenes a estar “Preparados”. For Life. ”La organización Scouting está compuesta por casi 2.2 millones de miembros jóvenes entre las edades de 5 y 21 años y aproximadamente 800,000 voluntarios en consejos locales en todo Estados Unidos y sus territorios.