De acuerdo con el estudio elaborado por MAP Economics and Business Advisors, es posible que para el 2021 la economía colombiana se recupere hasta alcanzar una tasa de 3.6%, posicionándose como uno de los países latinoamericanos menos afectados por el Covid-19.
Este buen panorama solo se llevará a cabo dependiendo de las medidas macroeconómicas que se implementen a inmediato, corto y mediano plazo como; evitar el cierre de las empresas, minimizar la pérdida de poder adquisitivo de los consumidores, poner en marcha la producción de algunos sectores y evitar cambios regulatorios que afecten al crecimiento.
Sectores como el aéreo, el turismo y el ocio (conciertos, bares y restaurantes entre otros) se encuentran entre los más afectados por el cese total de actividades.
Según el más reciente estudio “LATAM y Covid-19: Entender las restricciones de política económica para diseñar la salida” de la consultora MAP Economics and Business Advisors, encuentra a la región latinoamericana sumida en el peor desempeño económico de los últimos 40 años, y proyecta su mayor caída desde la Gran Depresión de 1930.
Sin embargo, ante este difícil panorama, el estudio posiciona a Colombia como uno de los países que menos se verá afectado por la crisis de Covid-19: su caída del PIB en el 2020 sería de -3.0%, una cifra menor al promedio regional que rondaría -5.8%. Además, para el 2021 la economía colombiana se puede recuperar a un ritmo del 3.6%. Aunque dependerá de las medidas macroeconómicas que se adopten en el inmediato, corto y mediano plazo.
“Para poder resistir la crisis actual, Colombia tiene grandes retos en medidas económicas y regulatorias que debe afrontar. De manera inmediata, debe evitar una destrucción masiva de valor, es decir que cierren empresas y haya despidos masivos. En el corto plazo, su atención debe estar centrada en la recuperación, poner en marcha la producción cuanto antes, atendiendo y liberando inteligentemente los riesgos sanitarios que van a perdurar. En el mediano plazo, se debe evitar que existan cambios regulatorios que dañen los factores de crecimiento estructurales” afirmó Juan Pablo Ronderos, director de MAP Economics and Business Advisors.
Así mismo, el estudio también resalta los sectores de la economía más afectados por la emergencia sanitaria y que requieren de una reactivación y liberación inteligente. Entre ellos, se destacan particularmente:
Sector ocio: Este sector, asociado con salidas a cines y teatros, bares, restaurantes, conciertos, museos, eventos deportivos y reuniones sociales, ha sido uno de los más afectados con un cese total de actividades en casi todos los países de la región. Lo que conlleva a un efecto cadena no despreciable sobre la demanda de alimentos y bebidas.
Según un estudio de la consultora internacional Boston Consulting Group (BCG) mencionado en el trabajo de MAP, con una disminución potencial de los pedidos del 60% al 80% durante un solo mes, aproximadamente 75% al 80% de los locales de servicios de alimentos de América Latina son altamente vulnerables al cierre.
Se trata de 2.2 millones de negocios de venta de comida en riesgo, que amenazan 4.2 millones de empleos. También se ve un impacto negativo en el canal de tiendas comerciales tradicionales, donde existen entre 350 y 400 mil negocios en riesgo y por lo menos 800 mil empleos en situación de vulnerabilidad.
Sector turismo: Este es un ejemplo de un sector totalmente paralizado por la crisis, que sufre un desplome de su demanda y que no se recuperaría hasta el primer o segundo trimestre de 2021. La reactivación podría ser más rápida para el turismo nacional (demorando entre dos y tres trimestres) y algo más lenta para los viajes de larga distancia e internacionales.