El grupo guerrillero Ejército de Liberación Nacional (ELN) negó que se esté preparando atentados en Bogotá, como lo informó en una carta reciente la embajada de Cuba en Colombia, mientras que el gobierno de Iván Duque descartó el supuesto ataque y lanzó criticas a La Habana.

«Después de verificar con todas las estructuras guerrilleras del Ejército de Liberación Nacional (ELN), clarificamos que la información que recibió la Embajada de Cuba en Bogotá no hace parte de los planes militares del ELN, y es posible que se trate de un falso positivo montado por la inteligencia militar del Estado colombiano».

De esa manera la dirección nacional de la organización rebelde desestimó la versión que se conoció a través de una carta dirigida al gobierno por parte del embajador cubano, José Luis Ponce, en la que se alertaba de un eventual «ataque militar» en la capital, por parte de los rebeldes.

«Nuestra embajada recibió una información, cuya verosimilitud no podemos evaluar, acerca de un supuesto ataque militar por parte del frente oriental de guerra del ELN para los próximos días en Bogotá», aseguró en su mensaje el diplomático, quien añadió que su gobierno indagó con los negociadores de paz de esa organización asentados en La Habana, quienes manifestaron «total desconocimiento» de la versión.

El grupo guerrillero lanzó hoy su propia hipótesis e interpretación del hecho al asegurar que se trataría de acciones que estarían planeando las fuerza militares locales para luego atribuírsela a ellos, con el propósito de «intensificar las presiones internacionales» sobre su delegación en la capital cubana.

Bogotá le reclama a La Habana la extradición de los negociadores de paz del ELN que aguardan en ese país a que se retomen en algún momento las suspendidas charlas de pacificación.

La base de ese reclamo reiterado de extradición de Colombia sería una de las razones para que el gobierno de Estados Unidos decidirá hace un mes incluir a Cuba en la lista de naciones que patrocinan el terrorismo.

Este jueves el ministro de Defensa colombiano, Diego Molano, cargó contra Cuba a propósito de la carta, al advertir que si «tienen intenciones de colaborar en temas de terrorismo, lo mejor que podría hacer es extraditar a los cabecillas del ELN».

Para el jefe de la cartera de Defensa, los rebeldes alojados en La Habana «tienen información del terrorismo» que podría ser útil para «las autoridades» y «la justicia de Colombia».

Cuba ofreció ser sede de los diálogos de paz entre el entonces gobierno de Juan Manuel Santos y el ELN, pero con la llegada de la administración de Duque y tras el atentado con coche-bomba en enero de 2019 a la principal escuela de policía en Bogotá, donde murieron 23 personas, las charlas quedaron en vilo.

Desde entonces Colombia insiste a Cuba que entregue a los miembros del grupo rebelde, con el argumento de que el actual gobierno no pactó ninguna negociación de paz, a lo que La Habana ha respondido que existen y se establecieron unos protocolos previos de seguridad para los negociadores que se deben respetar.

En su mensaje de hoy, el ELN advirtió -eso sí- que posee el mismo «derecho» que el gobierno para «actuar» y responder a los ataques militares que le lance la fuerza pública, de paso avisó que esa organización no está fraccionada y reiteró que su delegación en La Habana tiene a cargo al búsqueda de la paz y no participa en planes de guerra. (ANSA).