–«La oposición puede criticar pero tenemos el derecho de defendernos de la mentira», afirmó el presidente Gustavo Petro al aclarar que «en ninguna parte del país se ha prohibido ni el petroleo ni el gas» y que estos «seguirán produciendose normalmente».

El pronunciamiento lo hizo el mandatario en su cuenta en Twitter al replicar un trino de la congresista de Centro Democrático Paloma Valencia.

La oposición puede criticar pero tenemos el derecho de defendernos de la mentira.

Quien subio la deuda de Colombia fue el presidente que usted apoyo y eligio Paloma.

En ninguna parte del país se ha prohibido ni el petroleo ni el gas, seguirán produciendose normalmente. https://t.co/D7TpFBWvTr

— Gustavo Petro (@petrogustavo) October 20, 2022

El presidente Petro también afirmó que los contratos de explotación petrolera, carbonera y gasífica continuan normalmente.

«Los contratos de exploración vigentes continuan normalmente. No hay ninguna prohibición», puntualizó.

El jefe del Estado también preguntó:

¿Cómo podría EEUU compensar el estancamiento económico que provoca por su política monetaria interna que hace subir la tasa de interés y vacía de capitales el mundo?

Y se respondió:

1. Podría ejercer el liderazgo en el FMI para bajar deudas a cambio de inversión en economías descarbonizadas.

2. Podría desacelerar el crecimiento de la rentabilidad de la cocaína en Colombia, en pesos, generada por su propia política económica, equilibrando los flujos de dólares de la balanza de pagos.

Y a propósito de otro trino escribió:

Para Luis Carlos no existe el que haya subido la tasa de interés en EEUU y que ello derrumbó todas las monedas del mundo, incluido el peso, desde hace un año y en forma creciente. No existe el mundo en el prejuicio sectáreo. https://t.co/3oceoXOhSu

— Gustavo Petro (@petrogustavo) October 20, 2022

Además señaló: «Y no solo eso. Tiene que acudir a la mentira. ¿Desde cuando algún funcionario del actual gobierno ha responsabilizado a las FFAA del incumplimiento de los acuerdos con los indígenas desplazados en Bogotá, o de su violencia?

En otro trino, Petro se refirió a la crisis económica de Gran Bretaña, señalando que «comenzó cuando se intentó rebajar los impuestos a los más ricos. Hoy renuncia la primera ministra Liz Truss».

Y concluyó: «Una lección que hay que aprender».

El día anterior, en el Diálogo Vinculante realizado en Turbo, zona del Urabá antioqueño, el presidente Petro responsabilizó a Estados Unidos de la caida de las monedas latinoamerianas.

«Los Estados Unidos están arruinando a todas las economías del mundo», precisó y agregó que allá se toman decisiones «para protegerse ellos solos, a veces sin pensar en lo que va a ocurrir a través de sus medidas».

Además señaló que «se están saqueando las economías de las naciones latinoamericanas. Nuestras monedas caen todas. No solo el peso colombiano», puntualizó.

Se refiró a la marejada de gente que está migrando hacia el país del norte y que, dijo, EE.UU no quiere y advirtio que el gobierno estadounidense debe entender que para frenar ese éxodo, que por Colombia pasa, hay que lograr más prosperidad de nuestras naciones y para ello, debe ayudarlas.

«Nosotros creemos que es hora de ayudar a latinoamerica y al Caribe. Que los ecos de la guerra fría ya se acabaron, que tenemos problemas comunes que afrontar. Que hay cambiar la política de drogas les hemos dicho», subrayó.

Además indicó: Los analistas no se ha preguntado de dónde salen los dólares que hacen que se desplome el peso colombiano. Yo lo sé. Está escrito en el Banco de la República. Están saliendo de las exportaciones de carbón y de petroleo, propiedad pública, por concesión a empresas privadas por Ecopetrol a cambio de regalías».

Al efecto, reiteró su posición de que estas empresas paguen impuestos, que cuando se eleve el precio internacional muy por encima del costo, una mayor cantidad de dinero pase a las arcas nacionales para hacer los hospitales que necesita el Urabá, para comprar tierras para la mujer campesina, para hacer colegios y universidades para la juventud colombiana. Si ese es un bien público, dijo refiriendosd al petroleo, que compartan y no saquen los dineros en masa para que en Colombia haya más oportunidades».

Luego en Barrancabermeja, Santander, el presidente Petro recabo en el tema haciendo referencia a la reforma tributaria que se tramita en el Congreso de la República.

Al efecto indicó que por lo menos una parte de las grandes utilidades que deja la explotación y exportación del petróleo, que es un bien público, debe contribuir a resolver problemas nacionales y necesidades fundamentales de la sociedad colombiana, como la falta de colegios, universidades, alcantarillados, agua potable y tierra para los campesinos.

Durante la entrega de 400 títulos de propiedad a familias vulnerables del puerto de Barrancabermeja, el mandatario pidió hacer “un análisis de cómo lograr que, en medio de la tormenta económica, la economía colombiana pueda sostenerse, ahora y el año entrante”.

“Una de esas posibilidades es que, estando los precios de las materias primas altas y siendo las materias primas propiedad pública, una parte de esa riqueza, de esa utilidad, sea parte de la riqueza nacional para resolver los problemas nacionales”, dijo.

“Es lo que le hemos pedido al Congreso de la República que apruebe en la reforma tributaria. Eso no afecta a los viejos, no afecta a los jóvenes, es un tributo simplemente para recuperar parte de la riqueza que genera un bien que es propiedad pública: el bien que está en el subsuelo de la nación”, sostuvo.

Se necesita un pacto
En su intervención, el Jefe de Estado explicó que, de acuerdo con la Constitución, “el petróleo es de todos nosotros, de todas nosotras; es un bien público, es del subsuelo, es propiedad de la Nación”.

Sin embargo –agregó– se ha hecho un contrato de concesión con la empresa privada, no para que se vuelva propietaria del petróleo, sino para que pueda sacarlo y exportarlo, es decir, para “concederle la posibilidad de explotarlo comercialmente”.

En este sentido, el Presidente Petro señaló que con un precio actual de 90 dólares el barril (que es una ganancia muy grande, considerando que extraerlo cuesta 28 dólares), y tomando en cuenta que el petróleo es nuestro, “¿no debería ser nuestra una parte de esa gran ganancia y mientras se mantenga la gran ganancia? ¿No debería servir para hacer colegios, alcantarillado, agua potable? ¿No debería servir para comprar tierras para los campesinos, para hacer la universidad, que aquí se reclama con justicia, la gran universidad del Magdalena Medio, los colegios? ¿No serviría para llenar ciertas necesidades fundamentales de la sociedad colombiana?”.

A renglón seguido, el Mandatario preguntó: “¿Por qué entonces no pactamos que una parte de esa gran riqueza, mientras el precio del petróleo sea alto, se comparta con la sociedad colombiana?”.