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La inversión en exploración de petróleo y gas caerá 33% este año en Colombia por la Tributaria y la nueva política energética de Petro

–Como consecuencia de la incertidumbre por los efectos de la Reforma Tributaria y la nueva política energética del gobierno del presidente Gustavo Petro, la inversión privada en exploración de petróleo y gas caerá 33% este año en Colombia.

La inversión en exploración para 2023 será de USD 1.240 millones, 4% menos que en 2022 cuando fue de USD 1.290 millones.

«Ello se debe a que, pese a que la inversión en exploración de la empresa estatal se incrementará, la de las compañías de régimen privado, de acuerdo con los estimativos, estará entre USD 650 y USD 700 millones, 33% menos que en 2022», precisó el presidente de la Asociación Colombiana del Petroleo y Gas, ACP, Francisco José Lloreda Mera, al presentar este miércoles el informe económico ‘Tendencias de inversión en exploración y producción (E&P) de petróleo y gas en Colombia 2022 y perspectivas 2023’.

De acuerdo con el documento, la inversión exploratoria total (estatal y privada) en 2023 caerá 4%. En el caso de las compañías del régimen privado se reducirá 33%, mientras que la de la estatal se incrementará.

En el año 2023 se espera perforar entre 55 y 60 pozos exploratorios, para una producción promedio de petróleo de 770 bpd y un potencial de producción de gas de 1.183 mpcd.

El 60% de la inversión del 2023 será en gas natural en especial en la Costa Caribe. En materia de producción de petróleo, los departamentos de Meta y Casanare llevarán la delantera.

“La caída en la inversión exploratoria de las privadas se debe, principalmente, a la incertidumbre, y el incremento de la exploración por parte de Ecopetrol obedecería a la búsqueda de reservas, con énfasis en costa afuera”, aseguró LLoreda.

«En 2022 la industria de hidrocarburos afrontó un contexto nacional e internacional de altibajos e incertidumbre. El panorama para 2023 no luce muy diferente», advierte la ACP en el documento.

Y añade: «En Colombia se esperan decisiones de Gobierno con relación a la transición energética que serán trascendentales para el futuro del país y la industria de hidrocarburos. Entre tanto, a nivel global, con la reapertura de la economía en China y la crisis energética en Europa, se proyectan precios del petróleo altos y aumentos en la demanda de petróleo y gas. El reto está en la necesidad de armonizar los objetivos de descarbonización con las preocupaciones de suministro energético».

No obstante subraya que para responder al crecimiento de la demanda de petróleo y gas proyectada para este año, y hacer frente a los retos que esto conlleva, las empresas del sector continuarán trabajando por la seguridad energética nacional y la generación de recursos fiscales necesarios para impulsar el desarrollo de las regiones y del país.

Además señala que por lo anterior, resulta de gran importancia conocer las proyecciones de inversión en exploración y producción de petróleo y gas en Colombia.

El presidente de la ACP, Francisco José Lloreda concretó que en producción petrolera se estima una inversión de US$3.810 millones, 6% superior a 2022 y añadió que el recorte en producción como consecuencia de reforma tributaria es de US$200 millones (33%).

No obstante, se espera pasar de 754.000 a 770.000 barriles diarios, 2% superior a 2022.

En 2022 la producción totalizó US$3.590 millones, 37% superior a la de 2021 y 5% superior a la proyección de las empresas.

En gas, la producción comercializada fue de 1.071 Mpcd, 1% inferior a 2021, cuando fue de 1.087 Mpcd. La inversión en este campo oscilará entre US$300 millones y $400 millones.

La inversión en 2022 fue de US$4.880 millones; 55% superior a 2021 y 5% por encima de la presupuestada, debido principalmente a los altos precios internacionales del petróleo y el avance en implementación de medidas regulatorias de la Agencia Nacional de Hidrocarburos, ANH.

De acuerdo con el informe, el panorama de tendencias y perspectivas para 2023 se ve con incertidumbre para el sector, teniendo en cuenta factores como la entrada en vigencia de la Reforma Tributaria, las medidas frente a nuevos contratos, hoja de ruta en transición energética, implementación del Acuerdo de Escazú, entre otros.

Por ello, dice, la Asociación Colombiana del Petróleo y Gas (ACP), por noveno año consecutivo, presenta este informe elaborado a partir de los presupuestos de inversión y la percepción del ambiente de inversión para la industria de hidrocarburos, suministrados por los directivos de compañías que representan el 96% de la producción y, aproximadamente, el 82% de la exploración de petróleo y gas en el país, complementado con análisis del equipo económico de la ACP y estadísticas del Gobierno nacional.

Al respecto formula las siguientes precisiones:

El trabajo continuo y responsable de los distintos agentes de la cadena de distribución de combustibles líquidos sustenta hoy la movilidad y apoya el desarrollo económico del país. Actualmente, el 96% de la totalidad del parque automotor, de los cerca de 6,9 millones de vehículos y 10,9 millones de motos que circulan por el territorio nacional utilizan gasolina y diésel. Por otra parte, se movilizan anualmente alrededor de 130 millones de toneladas de carga por vía terrestre y 47 millones de pasajeros en aeronaves que consumen jet fuel.

Estos agentes, comprometidos con el progreso nacional y regional, continúan invirtiendo para mejorar la confiabilidad y calidad del servicio de suministro de combustibles a los consumidores. Además, siguen innovando para diversificar la oferta de energéticos para el transporte y contribuir a la reducción de emisiones de Gases Efecto Invernadero.

Este informe presenta un análisis del comportamiento del sector de combustibles líquidos en 2022 y la visión de mediano plazo de cara a la transición energética, basado en información estadística oficial y en los resultados de la encuesta realizada por la Asociación Colombiana del Petróleo y Gas (ACP) , en diciembre de 2022, a un grupo diverso y representativo de agentes de toda la cadena de distribución de combustibles líquidos: refinador/importador, transportador por poliductos, distribuidores mayoristas que abarcan el 95% del mercado, productores de biocombustibles (Fedebiocombustibles) y distribuidores minoristas (COMCE y Fendipetróleo, las dos asociaciones de los distribuidores minoristas que representan a las estaciones de servicio del país).

Finalmente, los agentes encuestados por ACP identificaron las siguientes acciones clave para atender el creciente consumo de combustibles, optimizar la operación y aumentar la confiabilidad del abastecimiento:

1) Reglamentar e implementar los procesos competitivos de asignación para la ejecución de proyectos de almacenamientos estratégicos.

2) Habilitar una nueva infraestructura de internación de combustibles vía poliducto, aprovechando el tramo existente del oleoducto Coveñas – Sebastopol. Este proyecto facilitaría y optimizaría la movilización de producto importado o de excedentes de Reficar a los centros de mayor consumo ubicados al interior del país (Antioquia, Bogotá, Cundinamarca y Valle del Cauca), que representan el 41% del consumo nacional de gasolina y diésel.

3) Ampliar prioritariamente los poliductos Galán – Chimitá (Bucaramanga) y Cartagena – Baranoa (Barranquilla). Cenit ya tiene programada la entrada en operación de estos proyectos para 2024 y 2025, respectivamente.
4) Conectar el poliducto Mansilla – Puente Aranda con el Aeropuerto El Dorado, y ampliar la capacidad de almacenamiento para asegurar mayor continuidad en el suministro de jet.

5) Ampliar el almacenamiento operativo del sistema de poliductos en Yumbo (Valle) y Gualanday (Tolima).

6) Ampliar la capacidad de suministro al sur del país a través del puerto de Buenaventura y su poliducto a Yumbo.

7) Plan de detección de alertas tempranas, y de prevención y remediación frente a deslizamientos que puedan afectar la operación de los poliductos.

8) Implementar, con el apoyo de autoridades nacionales y territoriales, planes de atención y resolución de bloqueos por comunidades, especialmente en vías del Valle, Cauca, Nariño, Putumayo, Amazonas, Chocó y Eje Cafetero; y en plantas ubicadas en Mamonal (Cartagena), Sebastopol (Antioquia), Apiay (Meta) y Mansilla (Cundinamarca).

9) Prever y habilitar rutas alternas para la distribución de combustibles a regiones apartadas y vulnerables frente a fenómenos climáticos.

10) Ampliar la capacidad de los puertos fluviales de Puerto Asís, Leticia, Puerto Inírida y Puerto Carreño

11) Fortalecer el control del consumo irregular en zonas de frontera.

Durante 2022, el precio de referencia en Bogotá de la gasolina corriente oxigenada en estaciones de servicio aumentó 10%, pasando de $9.192 por galón en diciembre de 2021 a $10.123 por galón en diciembre de 2022.

o Por su parte, el precio de referencia del diésel creció 4%, pasando de $8.982 por galón en diciembre de 2021 a $9.302 en diciembre de 2022. Variaciones inferiores a la inflación anual que fue del 13,12%.

INVERSIONES 2022 Y 2023 ORIENTADAS A MEJORAR LA CONFIABILIDAD Y CALIDAD EN LA DISTRIBUCIÓN COMBUSTIBLES Y AVANZAR EN LA DIVERSIFICACIÓN ENERGÉTICA

o En 2022, los agentes de la cadena de distribución de combustibles realizaron inversiones cercanas a los $3,7 billones:

o $1,3 billones en refinación, en mantenimientos mayores en las dos refinerías y la entrada en operación del proyecto de integración de las unidades de crudo de Reficar.

o $0,6 billones en el desarrollo de proyectos de ampliación de poliductos.

o $0,9 billones por parte de los distribuidores mayoristas en: adaptación de plantas de abasto al nuevo reglamento técnico, algunos proyectos de ampliación de capacidad de almacenamiento y conexión al poliducto, y en la red de estaciones de servicio.

o $0,8 billones directamente por los distribuidores minoristas, en la implementación del reglamento técnico y en proyectos de diversificación energética.

o Para 2023, de forma similar, se tienen programadas inversiones por $3,3 billones:

o $1,3 billones en mantenimientos mayores en las refinerías.

o $0,9 billones en la actividad de transporte, especialmente en la continuación del programa de inversión 2022 – 2024 en proyectos prioritarios del sistema de poliductos (Galán – Bucaramanga, Cartagena – Baranoa, Manizales – Pereira – Cartago, y Tocancipá).

o $0,5 billones por parte de los distribuidores mayoristas:

– 31% en adecuación y ampliación de plantas de abasto

– 50% en el sostenimiento de la red de estaciones

– 1% en inversión ambiental y social

– 4% en proyectos de autogeneración con fuentes renovables e
investigaciones en hidrógeno

– 14% en renovaciones y desarrollos tecnológicos

o $0,6 billones por la distribución minorista, que incluyen proyectos encaminados a transformar las estaciones en puntos de suministro de multi-energéticos.

o Los anteriores niveles de inversión evidencian la intención de los agentes de continuar apostándole al país con su esfuerzo por mejorar la confiabilidad y la calidad del servicio de distribución de combustibles a los consumidores y, al mismo tiempo, el interés de avanzar en la diversificación energética.

Para respaldar estas apuestas país será clave contar con señales regulatorias claras que aseguren a largo plazo la viabilidad económica de los distintos proyectos.

3.2. LA CADENA DE COMBUSTIBLES LÍQUIDOS EN COLOMBIA: IMPORTANTE GENERADOR DE EMPLEO

o En 2022 las actividades de la cadena de distribución de combustibles líquidos (refinación, producción de biocombustibles, transporte por poliducto, y distribución mayorista y minorista) generaron cerca de 150.000 empleos directos y 120.000 indirectos. Se espera aumenten 4% para 2023.

o Es decir que detrás de la garantía del abastecimiento de combustibles a los colombianos a lo largo de todo el territorio nacional está el esfuerzo y trabajo de 270 mil personas.