Internacional

ONU: El asedio ha convertido en agonía la vida para la gente de Gaza; todas las formas de castigo colectivo deben terminar

–Al término de una visita a la región, el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk, instó una vez más a detener la violencia, garantizar la seguridad de los trabajadores humanitarios y proporcionar acceso seguro a la asistencia. También se debe liberar a los rehenes, apunta. Hasta la fecha, sólo se ha permitido la entrada de 821 camiones con suministros vitales a la Franja de Gaza.

“El asedio total que ya dura más de un mes ha convertido en una agonía para los residentes de Gaza satisfacer sus necesidades más básicas y simplemente sobrevivir”, afirmó este viernes el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos. “Todas las formas de castigo colectivo deben terminar”, añadió.

En conferencia de prensa en Amman, Jordania, Volker Türk reiteró las exhortaciones cada vez más urgentes a un alto el fuego humanitario que permita la llegada de ayuda vital a Gaza, la liberación de los rehenes tomados en Israel y poner fin de la pesadilla que vive la población atrapada en ese territorio palestino.

La Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) reportó hoy que no hay acceso a la ayuda para millones de personas que permanecen en el norte de Gaza. Hasta la fecha, sólo 821 camiones de ayuda han podido entrar a Gaza a través del cruce de Rafah, en la frontera con Egipto, desde que se reanudaron las entregas el 21 de octubre. Antes del sitio a la Franja, una media de 500 camiones al día llevaban asistencia.

“El agua es escasa y el miedo es generalizado”, dijo, aludiendo a una conversación que tuvo minutos antes con un compañero de trabajo en Gaza que tuvo que huir de los bombardeos israelíes con su familia. “Sus hijos, de nueve y siete años, le hacen preguntas que él no sabe responder: ¿Por qué nos pasa esto a nosotros? ¿Qué hicimos?”

Las declaraciones de Türk se produjeron en medio de nuevos informes del bombardeo a un patio del Hospital Al Shifa en la ciudad de Gaza, donde se refugiaban miles de palestinos desplazados.

Türk instó a detener la violencia, “garantizar la seguridad de los trabajadores humanitarios, proporcionar acceso seguro para garantizar que la asistencia humanitaria pueda llegar a todos los necesitados, garantizar que las personas tengan suficiente para comer, agua potable para beber, atención médica y refugio, liberar a los rehenes, rendir cuentas y llevar ante la justicia, de conformidad con el derecho internacional humanitario, a los perpetradores de violaciones graves”.

Al referirse a los asesinatos cometidos por Hamás en el sur de Israel el 7 de octubre, Türk apuntó que “deberían indignarnos a todos”, y agregó que debe haber justicia, rendición de cuentas y reparación para las víctimas. También pidió que liberen a los 240 rehenes y que cesen los “disparos indiscriminados de cohetes contra Israel” por parte de grupos armados palestinos.

Durante la rueda de prensa con la que terminó una misión oficial de cinco días a Medio Oriente, el Alto Comisionado relató su visita al Hospital El Arish en Rafah, Egipto, donde vio a niños pequeños gravemente heridos en Gaza.

“Esos fueron los niños ‘afortunados’ que sufrieron terriblemente pero que todavía están vivos y reciben el tratamiento médico adecuado”, señaló, recordando que según las autoridades sanitarias palestinas, unos 4400 niños fueron asesinados en Gaza el mes pasado y 26.000 más fueron heridos, mientras que las personas con discapacidad perdieron a sus cuidadores y quedaron varadas bajo las bombas.

Türk señaló que el extenso bombardeo israelí de Gaza, incluido el uso de armas explosivas de gran potencia y alto impacto en áreas densamente pobladas, ha arrasado decenas de miles de edificios hasta los cimientos. “Israel debe poner fin inmediatamente al uso de tales métodos y medios de guerra, y los ataques deben ser investigados”, enfatizó.

Reiteró que si bien los civiles deben ser protegidos por el derecho internacional dondequiera que estén, ningún lugar de Gaza es seguro y que las zonas seguras designadas por el Ejército israelí plantean dudas sobre las garantías reales de seguridad.

Al referirse a los intensos ataques contra hospitales y sus alrededores en la ciudad de Gaza, Türk recalcó que el derecho internacional humanitario extiende una protección especial a las unidades médicas y exige que sean protegidas y respetadas en todo momento.

Asimismo, recordó que cualquier uso por parte de grupos armados palestinos de civiles y bienes de carácter civil para protegerse de un ataque contraviene las leyes de la guerra.

“Pero tal conducta de los grupos armados palestinos no exime a Israel de su obligación de garantizar que los civiles sean respetados: que se respeten los principios de distinción, precauciones en el ataque y proporcionalidad”, acotó.

En cuanto a las pérdidas registradas entre el personal de la ONU en Gaza, Türk expresó gran angustia: “el hecho de que hayamos perdido a 99 empleados de la Agencia para los Refugiados Palestinos (UNRWA) no tiene precedentes”.

El responsable de velar por los derechos humanos calificó de “inaceptable” el asesinato de más de 600 personas desplazadas que se habían refugiado en escuelas administradas por la UNRWA y precisó que existe un principio de inviolabilidad de las instalaciones de la ONU.

En cuanto a los acontecimientos de violencia en la Cisjordania ocupada, Türk pidió a las autoridades israelíes que garanticen la protección de los palestinos que se enfrentan diariamente a “la violencia, malos tratos, arrestos, desalojos, intimidación y humillación por parte las fuerzas y los colonos israelíes”.

Cerca 176 palestinos han sido asesinados desde el 7 de octubre, citó Türk, y añadió que la violencia de los colonos destruye vidas y medios de subsistencia y alimenta el desplazamiento en medio de una impunidad continua.

En este sentido instó a las autoridades israelíes a implementar las recomendaciones de los numerosos informes de derechos humanos en el territorio palestino ocupado que ha elaborado su Oficina a lo largo de los años que, entre otras medidas, piden investigaciones objetivas y rendición de cuentas para poner fin al ciclo de violencia y venganza contra comunidades enteras”.

“Cuando las autoridades nacionales se muestran poco dispuestas o incapaces de llevar a cabo este tipo de investigaciones, y cuando hay relatos controvertidos sobre incidentes particularmente significativos, es necesario que haya una investigación internacional independiente”, puntualizó.

El Alto Comisionado no ha obtenido acceso a Israel o los territorios palestinos ocupados, pero se ha comunicado telefónicamente con defensores de derechos humanos en ambos lados. En esas conversaciones, los activistas han destacado “el fracaso de la comunidad internacional al cumplir con su obligación de garantizar el respeto del derecho internacional humanitario y de utilizar su influencia para detener el sufrimiento desmedido de los civiles en medio de esta locura”, expuso.

Por lo mismo, Türk conminó a la comunidad internacional a asumir sus responsabilidades aplicando estándares universales “en todas y cada una de las situaciones del mundo”.

“Los Estados miembros con influencia deben trabajar más duro que nunca para lograr un alto el fuego entre las partes, sin más demora”, concluyó.

Estados Unidos anunció ayer que Israel había aceptado detener las operaciones militares en el norte de Gaza para permitir pausas humanitarias diarias de cuatro horas. Al respecto, el portavoz de la ONU, Stéphane Dujarric, afirmó que cualquier plan de pausas a corto plazo en los combates en Gaza debe llevarse a cabo en coordinación con las Naciones Unidas y tras el acuerdo de todas las partes. (Información Naciones Unidas).