–Luego de un trabajo detallado hecho en territorio por el Sistema de Alertas Tempranas (SAT), la Defensoría del Pueblo emitió una alerta temprana sobre la grave situación en que se encuentran niñas, niños, adolescentes y jóvenes en cinco municipios del departamento del Quindío.

Según el reporte, los menores están siendo instrumentalizados por grupos criminales en los municipios de Calarcá, Montenegro, Quimbaya, La Tebaida y Circasia.

Según la Alerta Temprana (AT) 001 de 2024, la población entre los 13 y 29 años de edad viene siendo víctima de las bandas conocidas como ‘La Cordillera’, ‘Los Flacos’ y ‘La Oficina’, estructuras ilegales que realizan actividades de control territorial con varios fines, entre ellos fortalecer el mercado de estupefacientes y asesinar a quienes intenten oponerse a sus intereses criminales.

“Nuestra Alerta Temprana especifica cómo vienen siendo utilizados los menores de edad en la cadena de expendio de sustancias ilícitas. Entre las dinámicas más comunes está la que se conoce como ‘carritos’, que son quienes transportan droga entre puntos de distribución y la zona de almacenamiento. Pero también, lamentablemente, utilizan a los jóvenes en ‘labores’ de ejecución de homicidios selectivos y traslado de armas de fuego”, afirmó el Defensor del Pueblo, Carlos Camargo Assis.

Añadió que desde tempranas edades están en ambientes donde se ‘normaliza’ el actuar criminal como un estilo de vida, incluso, con el auspicio, en algunos casos, de sus padres o familiares, que históricamente se han dedicado al comercio de drogas ilícitas y a otras actividades al margen de la ley.

Los grupos del crimen organizado locales se aprovechan de los jóvenes de bajos recursos económicos. En ocasiones tienen en cuenta que, por sus edades, es más factible que puedan ingresar a algunas instituciones educativas para que les vendan drogas ilícitas a otros jóvenes, advirtió el Defensor del Pueblo.

“Las alarmas están prendidas. Nuestros adolescentes y jóvenes viven con temor en un corregimiento y 15 barrios de Calarcá, en nueve barrios de Montenegro, en 13 de Quimbaya, en ocho de La Tebaida y 11 de Circasia. Hacemos un llamado a las autoridades de la región para que saquen a los niños, niñas y adolescentes de la criminalidad, a que sea mejorada la presencia institucional y a que haya más políticas públicas que favorezcan a esta población, caracterizada por estar en sectores de amplia complejidad social”, aseveró Carlos Camargo Assis.

Para el Defensor del Pueblo, es necesario, adicionalmente, enfrentar las diferentes problemáticas con la promoción de medidas de prevención, protección y atención, todo a cargo de los entes y autoridades competentes.

“Además de las labores policiales y militares para superar los factores de amenaza, es clave aumentar las oportunidades de acceso a la educación superior y la oferta de empleos formales para los jóvenes, que impliquen la garantía de sus derechos. De esta manera, serían minimizados los factores de vulnerabilidad y riesgo que los puedan llevar a la configuración de delitos”, puntualizó.

El Defensor del Pueblo hizo una recomendación importante al Ministerio del Interior. «Al fungir como Secretaría Técnica de la Comisión Intersectorial para la Respuesta Rápida a las Alertas Tempranas (Ciprat), debe no solamente coordinar, sino impulsar acciones preventivas y de reacción oportuna frente a los riesgos evidenciados en la AT 001 de 2024, emitida por el SAT de la entidad nacional de los derechos humanos», precisó.

Dijo que el fin primordial es que las entidades pongan en marcha las medidas a las que haya lugar para que las niñas, los niños, adolescentes y jóvenes no continúen corriendo peligro por cuenta de ‘La Cordillera’, ‘Los Flacos’ y ‘La Oficina’.