–La General Motors de los Estados Unidos anunció que comenzó este viernes el cierre y desmonte de su fabrica de vehículos en Colombia y simultáneamente tramitó ante el Ministerio del Trabajo la autorización para despedir colectivamente a 850 trabajadores.

En una carta a sus concesionarios en el país, la empresa asegura que «realizará la transición a un modelo de compañía nacional de comercialización, con la que mantendrá su presencia en el país a través de su marca Chevrolet y sus concesionarios, para así respaldar el lanzamiento de vehiculos de próxima generación, incluido un portafolio de clase mundial, respaldado por una experiencia exepcional para el cliente y por servicios posventa».

En consecuencia precisa que las operaciones de fabricación cesarán en la planta de Colmotores de Colombia y el proceso de desmonte comienza hoy».

Finalmente General Motor indica que «mantendrá su presencia historica en Colombia a través de su marca Chevrolet y su solida red de empresas y negocios como GMICA-Isuzu, GM Financial y ChevyPlan, así como sus socios comerciales, su amplia red e concesionarios y los servicios de conectividad de OnStar».

Colmotores fue fundada en 1956 y en principio trabajó con licencia de la compañia británica Austin, pero en 1965 la empresa Chrysler Corporation adquirió cerca del 60 % de la ensambladora y en 1979 General Motors adquirió completamente la compañía; finalmente, desde 2017 su razón social cambió a General Motors – Colombiana de Motores S. A. (GM-Colmotores).

Desde su fundación la empresa automotriz manufacturó varios modelos de vehículos de las marcas General Motors, Daweoo, Isuzu, Susuki, entre otros, comercializados en el país bajo la marca Chevrolet.

Según una reseña del Banco de la República, en términos sociales, GM Colmotores trabajó desde su funcionamiento en la búsqueda de soluciones para la pobreza del país. Por esto, parte de sus ingresos contribuyen al desarrollo de programas para la genración de empleo en la población vulnerable y en las comunidades afectadas por el conflicto armado del país; además, luego de la firma del acuerdo de paz de 2016, estableció procesos de vinculación laboral para desmovilizados, con el fin de aportar a la reintegración de los exmilitantes a la vida civil. Algunos de ellos se forman y capacitan en entreanimiento técnico para el reciclaje de vehículos, lo que también contribuye a elminar la brecha de desempleo de Colombia.