Los boyacenses celebraron hasta la madrugada de este lunes el triunfo de su equipo el Boyacá Chicó, que se coronó campeón del futbol colombiano, tras solo 4 años de estar militando en el profesionalismo.

En esa corta vida futbolistica, el único título que ostentaba el Chicó era el de campeón de la Primera B, el cual lo llevó al profesionalismo en el año 2003.

Este equipo chico, tuvo que derrotar a los grandes y poderosos como Cali, Nacional, Millonarios, Santa Fe, Junior, y finalmente el América, al cual derrotó en la fase de tiros desde el punto penal.

El titulo lo logro combinando la veterania de jugadores como ‘Prono’ Velásquez, Frank Pacheco, Víctor Pacheco, Néstor Salazar, Frankie Oviedo y Brahaman Sinisterra, entre otros, con la juventud, de Miguel Caneo, el mejor extranjero del torneo, Edwin Móvil y Juan Mahecha.

Adrián Ramos y Paulo César Arango, acostumbrados a darles alegrías a los americanos, no tuvieron fortuna anoche y fallaron los penales que les correspondieron en la definición del título ante Chicó en Tunja, tras el empate 1-1 en el tiempo reglamentario. Los ajedrezados, en cambio, estuvieron efectivos y lograron así su primera estrella en el fútbol profesional colombiano.

Los jugadores rojos tampoco habían brillado a lo largo del juego. De hecho, Ramos desperdició en el minuto 33 de la primera parte la opción más clara del partido, al elevar el balón cuando se encontraba solo, frente al arco del Chicó desprotegido, a escasos tres metros.

El equipo de Alberto Gamero, motivado por el empate que había logrado en Cali en el partido de ida el miércoles pasado, salió dispuesto a consolidar su campaña y alcanzar la estrella en el Estadio La Independencia, que estaba totalmente colmado, inclusive con hinchas americanos.