El presidente del Parlamento Andino, Fausto Lupera, llamó hoy «a la sensatez» a los «alborotadores» de «la guerra andina», y expresó su «categórico rechazo a estas pretensiones belicistas del Gobierno, más no del pueblo venezolano».

Lupera rechazó, en una declaración difundida por el PA este martes en Bogotá, «todas las acciones que intenten desintegrar la subregión» andina.

«El rompimiento de relaciones con Colombia está trayendo secuelas muy dolorosas, no sólo en lo diplomático y económico, sino en el campo de la integración latinoamericana», advirtió Lupera.

Las relaciones entre Bogotá y Caracas se encuentran muy deterioradas y con graves tensiones en la zona fronteriza debido al convenio militar entre Colombia y EE.UU. firmado a finales de octubre pasado y por el que Washington podrá usar al menos siete bases colombianas.

El presidente Chávez instó este domingo a sus compatriotas a «prepararse para la guerra», por temer que en las bases militares colombianas podría gestarse una agresión contra su país.

Según el presidente del PA, con esa situación entre Bogotá y Caracas «se gesta una división entre los tres bloques» de la región.

El primero, explicó, es el «de centro-derecha, conformado por Perú y Colombia»; el otro, «socialdemócrata, liderado por Brasil, Uruguay, Chile y posiblemente Argentina», y, el tercero, de «los países de la ALBA (Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América), de la que son miembros activos Bolivia, Venezuela y Ecuador».

Para Lupera, «hoy existe una crisis severa entre Colombia y Venezuela, ya que Chávez ha llamado a prepararse para la guerra contra Colombia, porque este último permitió a EE.UU. la instalación de bases militares, destinadas a la eliminación del narcotráfico».

Añadió que «así actúa el ‘socialismo del sigo XXI’ y los mal llamados Gobiernos bolivarianos que, como en este caso, con amenaza de guerra, se trata de desviar la atención de sus conciudadanos, ante los graves racionamientos de alimentos y servicios».

El presidente de PA también advirtió: «No podemos permitir que nuestros países entren en una carrera armamentista para defenderse, peor para atacar».

Subrayó que «comprar armas es un crimen de lesa humanidad», y remarcó que «los recursos para mitigar la pobreza no pueden ni deben gastarse en armas y soldados».

«El alto organismo de integración que presido llama a la sensatez a los alborotadores de la guerra andina, miembros de un ‘socialismo anacrónico y rancio’ empeñados en un juego extremadamente peligroso», concluyó Lupera, parlamentario ecuatoriano de la oposición