Según la alcaldesa de la localidad, Blanca Inés Durán, la comunidad gay se está viendo fuertemente afectada por los continuos robos y atracos de los que son víctimas por su condición sexual.

Según la mandataria local, los delincuentes aprovechan la condición de las víctimas, que en la mayoría de los casos no denuncian los delitos por el temor a la indiscriminación.

También reportó que en los bares LGBT (Lesbianas, Gays, Bisexuales y Transexuales) de la localidad a aumentado el número de robos por escopolamina, donde los facinerosos aprovechan los momentos de rumba para suministrar la sustancia a las víctimas.

La funcionaria indicó que el Distrito, ha previsto acciones tendientes a reducir los riesgos para esta población, como lo son campañas de sensibilización, estrategias de seguridad encaminadas a proteger a la comunidad gay y mayor acceso en materia de salud y educación.